El presidente argentino Mauricio Macri mantendrá el 27 de abril en Washington un esperado encuentro con su par de Estados Unidos Donald Trump al que conoce desde hace décadas y con quien espera aceitar las relaciones y mejorar el intercambio comercial.
En su primera reunión bilateral, ambos mandatarios conversarán sobre asuntos bilaterales y regionales como la deteriorada situación en Venezuela, la profundización de «la cercana relación» entre Argentina y Estados Unidos y la expansión del comercio, dijo un comunicado de la Casa Blanca.
Señaló además que el mandatario estadounidense, que asumió el poder en enero, y su esposa, Melania Trump, «están deseosos de dar la bienvenida» a Macri y la primera dama argentina Juliana Awada.
La reunión se celebrará en la sede del gobierno estadounidense y ambos mandatarios estarán acompañados por altos funcionarios de sus administraciones, tras lo cual compartirán un almuerzo de trabajo, indicó a su vez la presidencia argentina.
Macri, un tecnócrata conservador que llegó al poder en diciembre de 2015, se reunirá además con miembros de comisiones del Congreso estadounidense y del sector privado, indicó la canciller argentina Susana Malcorra en declaraciones difundidas por la presidencia.
La creciente crisis en Venezuela también será abordada por ambos mandatarios, dos de las voces más críticas del gobierno de Nicolás Maduro en la región.
En los últimos días murieron tres personas durante las protestas contra Maduro luego de dos sentencias del Tribunal Supremo de Justicia en las que asumió las competencias legislativas de la Asamblea Nacional y limitó la inmunidad de los diputados.
Malcorra afirmó que «la solución tiene que partir de los venezolanos que tienen que encontrar una salida a través de un proceso eleccionario».
La canciller recordó que el Mercosur, bloque que integran Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay, y la Organización de Estados Americanos cuestionan que se hayan «quebrado los mecanismos de balance de las instituciones» y están «preocupados» por la inhabilitación del dirigente opositor y excandidato presidencial venezolano Henrique Capriles para participar en eventos electorales por 15 años.