Abner Neptalí Adjunta Tona (33), oficial de Polilara, adscrito a la Unidad Motorizada, y Javier Alejandro Quintero Romero (29) mesonero, fueron asesinados la madrugada del domingo en el municipio Palavecino.
El cuerpo del funcionario fue abandonado en un matorral en Valle Hondo y el del mesonero lo trasladaron hasta el ambulatorio de Cabudare. Ambas muertes fueron reportadas como hechos distintos, pero en horas de la mañana de ese mismo domingo fue que sus familiares indicaron que eran amigos y andaban juntos, tal como lo reseñó EL IMPULSO en su edición de este lunes.
Funcionarios del Eje de Homicidios del Cicpc Lara comenzaron a indagar en torno a los hechos y según sus investigaciones, determinaron que es el robo, el móvil del doble homicidio.
Trascendió que el funcionario de Polilara y su amigo se desplazaban en una motocicleta Bera gris, tomaron un camino para desviarse y se metieron por una vía que comunica entre la Alfarería y Primero de Mayo, en Cabudare. Eran aproximadamente las 2 de la madrugada y fueron interceptados por un grupo de hombres, se calcula entre tres a cuatro sujetos, quienes operan en dicha zona y suelen cometer robos.
A ambos los despojaron de sus pertenencias y los criminales al darse cuenta que una de sus presas estaba armado y era funcionario policial, les dispararon y escaparon del lugar. Una fuente policial manifiesta que no han logrado precisar si los dos sujetos que llevaron en una moto a Quintero Romero al ambulatorio fueron los criminales, lo cierto es que quien lo hizo fue con intenciones de salvarle la vida y el efectivo policial quedó tirado en el sitio.
Por la misma fuente se conoció que se logró ubicar el carro blanco en el que trasladaron al Polilara hasta Valle Hondo, se trataba de unas personas que al ver el cuerpo tirado lo levantaron e intentaron ayudar, pero en medio del camino se dieron cuenta que era funcionario policial y pensaron que llegar a un centro asistencial con una persona fallecida le traería problemas y decidieron deshacerse del cuerpo en Valle Hondo, pensando que como no eran los criminales nadie los ubicaría.
Tras ser encontrados, se aclaró esa parte del hecho, pero ya los sabuesos trabajan en ubicar a las personas que allí cometieron el doble homicidio.
Despedido por amigos
El féretro del funcionario Adjunta Tona fue trasladado hasta la sede de la Brigada Motorizada, lugar que vio iniciar su carrera y la vio culminar, pues desde que entró a las filas de Polilara fue destacado en esa área y precisamente el día que fue asesinado a tempranas horas había entregado su servicio.
Sus compañeros lo describieron como una persona servicial, buen compañero, a quien siempre le gustaba trabajar. Lágrimas rodaron por sus rostros mientras le daban el último adiós al efectivo policial.
Familiares de ambas víctimas esperan que pronto se haga justicia por este caso.
