Las guardias de 24 horas que realizan, la dedicación exclusiva a su centro asistencial y el trabajo en general que llevan a cabo más de 130 médicos residentes en la región, se ve “pisoteado” por el Ministerio de Salud ante el retardo del pago de estos galenos, quienes acumulan tres meses sin recibir “un bolívar” -tampoco el bono de alimentación-, por lo cual salieron a las calles de Barquisimeto la mañana de este jueves para denunciar su lamentable situación.
“Se han desmayado residentes operando porque pasan más de 24 horas sin comer; no tienen con qué comprar. Son muchos problemas que la gente no sabe, pero que el médico joven está atravesando por la crisis país”, manifestó a EL IMPULSO el presidente de la Sociedad de Médicos Internos y Residentes del Hospital Central Universitario Antonio María Pineda (Somir-Lara), Jesús Guarecuco.
Luego de una asamblea que efectuaron en el auditorio del Hcuamp, el gremio en general decidió apoyar a los nuevos médicos de Lara -ingresados en 2017- que laboran en el Hospital Universitario de Pediatría Agustín Zubillaga, el Hospital Luis Gómez López y el Hospital Central.
Protagonizaron una breve protesta en la avenida Vargas de Barquisimeto.
Comentó Guarecuco que esta situación se ha generado en otras oportunidades; no obstante, por la crisis económica “es imposible sobrevivir” en la actualidad.
En Mérida, Carabobo y Miranda, afirmó, están atravesando por la misma problemática, aunque con menos tiempo de retraso.
Pasan a la acción
En el encuentro decidieron que una comisión de médicos guaros viajará a Caracas el 10 de este mes para exigirle al ministerio lo que por derecho les corresponde.
Dependiendo de la respuesta que obtengan, según informaron, evaluarán la suspensión de las consultas y cirugías electivas en los principales centros asistenciales de la entidad.
Ello lo decidirán el martes 18 del mes en curso a través de una asamblea, a la cual invitaron públicamente a la Defensoría del Pueblo, representantes ministeriales y consejos comunales.
Repudian militarización
Guarecuco recordó que Somir-Lara rechaza la militarización que existe en los centros asistenciales del país.
“Los militares vinieron en un principio por el Motor Farmacéutico pero se han atribuido funciones que no les corresponden y que no permitiremos”.
Reprochó que funcionarios de la Guardia Nacional revisen a todo el personal médico en la salida, y, además, rechazó que se entrometan en aspectos netamente médicos.
