Construyendo la Venezuela que queremos se denominó la ponencia que este viernes realizó en Barquisimeto el ingeniero Juan Andrés Sosa, presidente de la Cámara Venezolana de la Construcción (CVC).
Resaltó Sosa que la situación es cada vez peor. En este momento, el sector construcción está grave ya que está paralizado en un 90% y se han perdido más de 1.200.000 empleos. Por otra parte los insumos están ausentes.
-Sidor está produciendo al 6 % de su capacidad, las cementeras al 40 % de su capacidad y el poder adquisitivo del ciudadano está golpeado. Un 93 % de la población manifiesta que no puede adquirir viviendas, además, la banca nacional apenas es una décima parte de lo que era en 2011. No hay recursos para financiar.
Ante este panorama, el ingeniero considera que es momento de tomar decisiones drásticas y en el corto plazo, que sin duda representan un costo político, pero es la única manera.
Entre las medidas que sugiere el presidente de la CVC se encuentran permitir capitalizar la banca a través de la revalorización de los activos inmobiliarios, lo que liberaría una serie de fondos para el financiamiento; sustituir el programa Misión Vivienda, que ha resultado costoso, ineficiente e insostenible.
Según las propias cifras del Presidente de la República, hasta noviembre de 2016 se construyeron 1.150.000 viviendas y se gastaron 95 mil millones de dólares, cada vivienda le salió al Estado en 83.000 dólares.
“Esa es una cifra que puede justificase en la ciudad de París o Nueva York. Esa no es una cifra justificable para Venezuela. Eso representa cuatro veces lo que le cuesta al país producir una vivienda. Se han perdido más de 76 mil millones de dólares”.
Resaltó que el venezolano requiere un subsidio directo para poder rescatar su capacidad de compra y evitar descapitalizarse.
Puntualizó que 77 % de los jóvenes, según la encuesta Encovi, manifiesta su deseo es irse del país porque no tienen manera de poder resolver sus necesidades básicas, entre estas la adquisición de una vivienda, lo cual es fundamental para las futuras familias venezolanas. En ese sentido, dijo, el Estado tiene que tomar una decisión importante, dejar de contratar empresas extranjeras para la construcción de viviendas en el país, tal y como lo ha venido haciendo y racionalizar los costos.
Es vital darle un subsidio directo al comprador para poder reactivar la industria de la vivienda.
En materia de infraestructura Sosa subrayó que la situación no deja de ser grave.
Todas las obras de infraestructura en este momento están paralizadas producto de la falta de financiamiento internacional que tiene su origen en la pugna que tiene el Ejecutivo nacional con la Asamblea Nacional, lo cual afecta a todos los venezolanos.
“Eso ha conllevado a que nosotros en este momento ostentemos el penúltimo lugar en competitividad en infraestructura a nivel latinoamericano, esto sin duda impacta la calidad de vida de todos los venezolanos”.
El entrevistado finalmente le hizo un llamado al gobierno, lo exhortó a la reflexión, a la concordia.
“El gobierno pelea hasta con su sombra. Tiene que dejar de pelear. El Ejecutivo se peleó con la Comunidad Andina de Naciones (CAN) y se retiró. Y así en otras instancias. Esas cosas nos perjudican”.
Se conoció que la CVC consignó el documento (Construyendo la Venezuela que queremos) al Ministerio de la Vivienda, amén de que la directiva se reune con el gobierno desde hace dos meses, sin obtener una respuesta.
“Ya son 60 días, un período suficiente para haber tomado una decisión importante y vemos que continúan contratando empresas chinas para la construcción de viviendas, pagándoles en divisas, trayendo obreros chinos, desplazando a las empresas nacionales de construcción y a los obreros”.
Para el ingeniero es momento de enseriarse ante las propuestas que plantea la Cámara Venezolana de la Construcción. También le hizo un llamado al parlamento nacional, a los gremios y cámaras regionales, entes que también pueden brindar sus opiniones para enriquecer el petitorio.
