Los problemas económicos de Venezuela dejaron en el aire el programa de aceite para calefacción gratuito proveniente de ese país que coordina una organización sin fines de lucro de Massachusetts y que ha ayudado a cientos de miles de estadounidenses pobres.
Este fue el segundo invierno seguido en que la empresa venezolana Citgo no contribuyó al programa «Joe-4-Oil», parte de la iniciativa de Citizens Energy encabezada por el empresario y ex legislador demócrata Joseph P. Kennedy II.
La decisión de la subsidiaria de la empresa estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA) coincide con el derrumbe de los precios del petróleo y su consiguiente impacto en la economía venezolana.
Las esperanzas de Kennedy de que el petróleo llegase hacia el final de invierno se desvanecieron definitivamente.
«Si bien esta no es una buena noticia, obviamente no nos sorprende» a la luz del estado de cosas en Venezuela, declaró Kennedy a la Associated Press. Los ejecutivos de Citgo se negaron a hacer comentarios para este artículo.
El programa de aceite de calefacción de Citgo fue lanzado tras el huracán Katrina, que afectó la capacidad de refinación de petróleo de Estados Unidos e hizo que subiesen los costos energéticos justo cuando llegaba el invierno.
El presidente de Venezuela Hugo Chávez, fallecido en el 2013, respondió a un pedido de ayuda de Kennedy tras criticar al gobierno de George W. Bush por no hacer lo suficiente para mejorar la situación de los pobres del país.
A lo largo de los años el programa suministró aceite para calefacción por valor de 500 millones de dólares a 2 millones de participantes de 25 estados y el Distrito de Columbia, complementando la ayuda del gobierno nacional en el campo energético.
Rita Soucier, de 80 años, dijo que ella y su esposo recibieron asistencia varias veces, que les permitió tener calefacción en su tráiler en Howland, Maine.
Este año no hubo ayuda, indicó Soucier, cuyo esposo, un trabajador de una papelera, falleció el mes pasado. Pero dice que se siente agradecida por la ayuda del pasado.
«Viene muy bien cuando no eres la persona más rica del mundo», expresó Soucier, quien dice que tiene pocas necesidades. «Mientras pueda salir adelante, no quiero más».
Venezuela tiene las reservas de petróleo comprobadas más grandes del mundo, pero ha sido muy golpeada por la caída de los precios. Se ha visto obligada a recortar programas sociales y las crecientes divisiones políticas han sacudido al país, generando escasez de alimentos y una fuerte caída del bolívar venezolano.
Citizens Energy sigue operando otros programas. La organización fue creada en 1979 para transferir ingresos de empresas comerciales a programas caritativos.
Pero el programa de aceite para calefacción podría tener sus días contados. «Joe-4-Oil» no funcionó este año ni el año pasado y un mensaje online dice que no está recibiendo solicitudes de aceite para calefacción.
La agrupación, no obstante, no pierde las esperanzas. El programa de Citgo ya fue suspendido en el 2009, pero regresó a los pocos meses.
Citizens Energy, mientras tanto, sigue operando proyectos de energía solar y eólica para personas de bajos recursos, ofrece subsidios energéticos a refugios para indigentes y subsidios para el gas natural a hogares de gente humilde.
«Lo positivo es que Citizens Energy sigue creciendo y prosperando, ofreciendo importantes beneficios a personas de bajos recursos de todo el país como resultado del aporte de empresas que nos permiten cumplir nuestra misión», declaró Kennedy.