Caer en la rutina es una misión fácil y al mismo tiempo peligrosa en la que todos podríamos participar y aunque deberíamos evitarla, es normal que por nuestros horarios, actividades, el estrés y otros factores, nos veamos envueltos en un espiral donde el camino siempre resulte ser el mismo…
Si te decimos que existen maneras sencillas para saltar el muro, tomar un atajo y seguir el rumbo hacia tu meta ¿nos creerías? … esperamos que sí, pues al igual que tú, también nos hemos sentido, dentro de una rutina en algún momento de nuestras vidas, a tal punto que podríamos saber de memoria cuantas vallas vemos en el camino de la casa al trabajo y viceversa.
¡Pon atención! Porque nuestra nueva misión será esquivar la rutina y darle rienda suelta a nuestro cerebro para que la creatividad fluya en cualquier situación. No necesitas materiales ni seguir un paso a paso, solo tener ganas de hacer las cosas bien y prestar atención a los pequeños, pero beneficiosos tips, que te presentamos a continuación.
Elige la “peor” idea
Siempre es bueno tomar riesgos, al final del día, aunque las cosas no salgan del todo bien habrás aprendido algo nuevo.
Traza metas cortas
Una forma de motivar tu cerebro y consecuentemente tu creatividad, es impulsándote a ti mismo a cumplir pequeñas metas que posteriormente te lleven a otras más grandes, ¡sube la colina y luego escala la montaña!
Cuestiónalo todo
No te quedes solamente con lo que dijo “Pedro o Juan” investiga, busca, lee e infórmate por otros medios para corroborar eso que escuchaste.
Busca inspiración
Todos nos hemos inspirado con algo o alguien en ciertos momentos de nuestras vidas, no te avergüences de ello, “copiarse” no está mal siempre y cuando busques mejorar la idea e imprimirle un toque personal.
Pide opinión
No te guardes todo para ti, conocer otras perspectivas te aportará diversos enfoques sobre el mismo tema, lo cual puede ser muy interesante. Preguntar o pedirles opinión a tres personas diferentes te ayudará a tomar una decisión más certera.
Haz garabatos
Diversos estudios han demostrados, que dibujar ayuda a relajar la mente. Espirales, rayas, flores y hasta arcoíris pueden aproximarte a la respuesta que estas buscando.
Desconéctate
Tal y como si desenchufaras algún electrodoméstico, desconectar nuestro cerebro, por momentos, nos permitirá crear nuevos vínculos. Deja a un lado lo que te encuentras haciendo, respira, distrae la mente en otra cosa y luego de un rato vuelve a retomar.
Dale a tu cuerpo alegría…
Camina, corre, baila, salta o haz cualquier actividad que obligue a tu cuerpo a romper con su postura. Esto hará que la energía se reactive y el abismo desaparezca.
Mira y escucha
Un video o una canción son los aliados más adecuados a la hora de traer la creatividad de vuelta a casa, además te permiten mantener el cerebro activo.
Comienza de nuevo
Si aun después de poner en práctica todos o casi todos estos tips no logras avanzar en tu actividad borra, tacha o bota lo que estás haciendo y comienza de nuevo¡es una excelente opción!
Un dibujo para cada estado
Estrés: Dibujar flores disminuye el estrés y aumentan la relajación
Tristeza: Colorear arcoíris hace que olvides que estabas triste
Olvido: Crear laberintos en una hoja estimula tu memoria y te ayuda a recordar
Ansiedad: Hacer un collage con imágenes de cosas que llamen tu atención, te hace entender lo que realmente deseas
Rabia: Las líneas son ideales para anular este sentimiento
Cero creatividad: Dibuja espirales y observa como sales de ese problema.