Es importantísimo recorrer caminos y enfrentar retos que se presentan aplicando valores y principios inculcados por nuestros padres en el seno familiar y aquellos adquiridos como patrón de conducta en nuestro crecimiento personal y profesional.
Entre ellos, el respeto por los demás, sentido de responsabilidad, transparencia, puntualidad, honestidad, solidaridad, libertad y sobre todo el ejercicio y disfrute de ellos con un patrón congruente.
Ello implica que debemos respetar esos valores y principios para lo cual se requiere una actitud lógica y consecuente con ellos. Eso es ser coherentes con nosotros mismos, con el colectivo y con aquellos que han depositado su confianza en nosotros por razones profesionales, políticas, gremiales, académicas o por cualquier otra.
Ciudadanos que han tomado la decisión de intervenir como dirigentes políticos en asuntos públicos y aquellos que han irrumpido en política llenando vacíos dejados por una dirigencia política irresponsable deben actuar con total responsabilidad y coherencia.
Es lamentable ver a diputados, políticos, representantes de partidos, gobernadores y “opinadores de oficio”, esgrimir argumentos, fundamentos, análisis y puntos de vista sobre un tópico y por otro lado con sus actos hacen lo contrario, demostrando una incoherencia e irresponsabilidad total.
El diputado José L. Pirela (MPV) en entrevista con V. Villegas indicó que la validación de partidos es anticonstitucional, ilegal y antidemocrática. Sin embargo decidieron participar. ¿Qué tal? El secretario de dicho partido, diputado Simón Calzadilla, también en entrevista con Villegas declaró que el proceso atenta contra la libertad, pluralidad, participación y posibilidad de escoger entre varias opciones y aún basado en sentencia del TSJ restringe el derecho a la libre asociación. Dijo que ellos están conscientes que la validación es un proceso para eliminar partidos políticos y muy difícil de cumplir, pero participaron para demostrar que efectivamente esa dificultad es cierta, de hecho salieron ya raspados. Digno de “aunque usted no lo crea”.
AP acudió al proceso y sus dirigentes parecen representantes del CNE alabando la actuación del no bien ponderado ente comicial. ¿Es coherente para ellos participar en un proceso a todas luces ilegal? Ellos saben que estamos en dictadura y que las instituciones incluyendo al CNE son controladas por el oficialismo y que la validación es una trampa más para llevar a cabo un exterminio político controlado,¿porque participaron?, ¿será que ellos están un ratico en oposición y otro en revolución?, ¿qué hay detrás de todo esto?, ¿dónde está la coherencia de la dirigencia?
VP y PJ, también decidieron participar en la farsa a sabiendas de su inconstitucionalidad. De no haber participado, la opción electoral se pudiera concretar por vía de partidos y tarjetas que no necesitan validarse, es decir, hay otras vías de permanecer en la lucha sin ayudar al régimen. Escenario totalmente distinto a cuando en el 2005 dirigentes de AD, PJ, Copei y Proyecto Venezuela irresponsablemente incitaron a sus seguidores a no votar en elecciones de la AN para que se considerara ilegítima, lo cual fue un error gravísimo.
¿Dónde dejaron la irreverencia, insurgencia, rebeldía, protestas y desobediencia que dentro del marco legal ponen en entredicho al régimen? ¿Será entonces que piensan que Leopoldo está bien preso porque ejerció su derecho a protestar?
¿Es eso ser coherentes con sus seguidores y colectivo? Yo me quedó en la acera de enfrente, apostando a una unidad superior que coherentemente bregue por la salida del régimen y por una Venezuela libre. Nuestro horizonte es azul y nuestra bandera la libertad. Nos podrán llamar radicales y divisionistas más lo que hemos hecho es ser consecuentes con el discurso y con nuestros hechos, es decir, coherentes y por ello seguimos orgullosamente sumando con la frente en alto. Como dijo Benito Juárez: “Malditos aquellos que con sus palabras defienden al pueblo y con sus hechos lo traicionan”.