Un barco militar y un helicóptero artillado dispararon contra una embarcación abarrotada de migrantes somalíes frente a la costa de Yemen y mataron a por lo menos 42 personas, informaron el viernes una agencia de la ONU, representantes del gobierno yemení y un sobreviviente del ataque.
Los rebeldes acusaron a la coalición encabezada por Arabia Saudí de realizar el ataque ocurrido la madrugada del viernes. La coalición ha bombardeado severamente la costa cercana alrededor de la ciudad de Hodeida y acusa a los rebeldes chiíes, conocidos como hutíes, de traficar armas hacia el puerto con ayuda de botes pequeños. Hasta el momento la coalición no ha hecho comentarios al respecto.
Un traficante yemení que sobrevivió al ataque dijo que la embarcación transportaba refugiados somalíes, incluso mujeres y niños, que huían de la guerra en Yemen y trataban de llegar a Sudán.
Al-Hassan Ghaleb Mohammed dijo a The Associated Press que el bote zarpó de Ras Arra, en la costa sur de la provincia de Hodeida y que estaba a unos 50 kilómetros (30 millas) de la costa, cerca del estrecho de Bab al-Mandab, cuando el barco militar y el helicóptero dispararon.
Describió que hubo escenas de pánico y los refugiados alzaban lámparas, al parecer en señal de que eran solo unos migrantes pobres. Agregó que el helicóptero dejó de disparar, pero para entonces ya había decenas de muertos. Mohammed resultó ileso.
Un alto funcionario de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) dijo que 42 cuerpos fueron recuperados luego del ataque. Mohammed Abdiker, director de emergencias de la OIM en Ginebra, agregó que el ataque ocurrido a las 3 de la mañana del viernes fue «totalmente inaceptable» y que los combatientes responsables debían haber comprobado quién estaba a bordo del barco «antes de disparar».
Añadió que unos 75 hombres y 15 mujeres que sobrevivieron al ataque fueron llevados a centros de detención y que algunos cadáveres fueron llevados a un mercado de pescado en la ciudad de Hodeida debido a la falta de espacio en centros mortuorios.
Laurent De Boeck, jefe de la oficina de la OIM en Saná, Yemen, informó que la agencia cree que todos los que iban a bordo eran refugiados registrados.
De Boeck detalló que la OIM está en contacto con los hospitales y el centro de detención para proveerles el cuidado médico necesario.
Un funcionario médico yemení informó que 25 heridos, incluso gente que perdió brazos y piernas fueron llevados a hospitales. El funcionario no dio su nombre porque no estaba autorizado a hablar con la prensa.
La provincia costera de Hodeida ha sufrido intensos bombardeos en los últimos dos años, desde que una coalición de liderazgo saudí se sumó al conflicto en Yemen con una campaña aérea en apoyo del gobierno con respaldo internacional.
Pese a la guerra, migrantes africanos siguen viajando a Yemen en su ruta hacia Arabia Saudí, donde aspiran a conseguir mejores empleos y una vida mejor.