El gobierno de Venezuela rechazó este jueves la recomendación de un grupo de seis países, entre ellos Brasil y España, pidiendo la liberación de los presos políticos, en el marco del Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas.
En un documento publicado esta semana y que fue discutido este jueves en la sede el Consejo en Ginebra, Caracas detalla su posición sobre una lista de más de 200 recomendaciones hechas en noviembre pasado por los estados miembros de la ONU.
La recomendación de liberar a los presos políticos, impulsada por Australia, Brasil, Irlanda, Canadá, España y Estados Unidos, es solo una de las 274 que contiene el documento de noviembre.
De ellas, Venezuela rechazó este jueves explícitamente 53 y «tomó nota» de otras 28, un eufemismo que la ONU considera también como un rechazo.
El gobierno venezolano considera «sesgadas, confusas, políticamente mal intencionadas, elaboradas sobre bases falsas y contrarias al espíritu de cooperación y respeto» todas las recomendaciones rechazadas en su documento.
Venezuela tampoco atendió un llamamiento de 19 países para que invite a visitar el país a los expertos de la ONU que velan por los derechos humanos.
En su documento presentado el jueves, Venezuela desestimó asimismo los requerimientos de Brasil, Uruguay y Georgia para que reconsidere «su decisión de retirarse de la Convención Americana sobre Derechos Humanos».
Ocurrió lo mismo con la demanda de ocho países para que Caracas restablezca el Estado de derecho, la independencia, autonomía e imparcialidad del sistema judicial, la separación de poderes y el respeto al debido proceso.
Venezuela tampoco aceptó una recomendación de Suecia para «combatir la situación de inseguridad alimentaria y de salud pública» -una inquietud también recogida por Alemania, Canadá e Islandia- ni otras de Letonia, España, Canadá y México para que se garantice la libertad de expresión.