Los actos vandálicos que se han venido cometiendo contra instalaciones de Hidrolara, así como también las fugas y tomas ilegales originan muchas de las fallas en el suministro de agua potable a los habitantes de Barquisimeto y Cabudare.
Lo declaró el ingeniero Pedro Sánchez, presidente de Hidrolara, al ser consultado sobre las frecuentes denuncias de falta del vital líquido en ambas ciudades.
Explicó que en el tramo E Rodeo-Quíbor del sistema Alto Tocuyo, que trae agua del embalse Dos Cerritos, se han detectado numerosas tomas instaladas por productores agrícolas de la zona.
Explicó que esas tomas, además de las fugas, representan 400 litros menos por segundo para los consumidores de Barquisimeto.
Anunció la instalación de una mesa técnica con esos productores para resolver técnicamente la situación.
Considera necesario que utilicen otras alternativas para regar sus siembras y no seguir recurrir el agua potable destinada a la polblación.
Con respecto a los actos vandálicos, calificó de extraño que en algunos casos los autores de los mismos no lo hacen para robar material sino, solamente, para dejar inactivas las instalaciones.
Está el caso del pozo 9B, destruido dos meses este mes de marzo, dejando sin agua la central de rebombeo de El Recreo y a miles de personas en las urbanizaciones de Cabudare.
Además, enfatizó, cada incursión vandálica como esas representa para Hidrolara gastos por entre 25 y 30 millones de bolívares.