Este lunes transportistas de más de 18 estados de toda Venezuela participarán en un gran paro. Conductores de todas partes del país se concentrarán en distintos puntos de donde saldrán en caravana hacia la sede de la Fundación Fondo Nacional de Transporte Urbano (Fontur), para reclamar por cada uno de los pesares a los cuales se enfrenta el gremio.
El presidente de la Federación Nacional de Transporte, Erick Zuleta, indicó que aún siguen a la espera de que el Ministerio de Educación instale las nuevas máquinas del pasaje estudiantil, las cuales permitirán, supuestamente, que el dinero sea abonado a la cuenta del transportista inmediatamente. Por los momentos las unidades de transporte urbano utilizan el antiguo sistema de cobro de la Tarjeta Inteligente, pero el Gobierno nacional tan solo les cancela al día dos estudiantes por unidad, cuando la realidad es que más del 30 % de los usuarios pertenecen al sistema de educación.
Por otro lado, el gremio denunciará las fallas en la distribución de repuestos por parte de la proveeduría. “Ni siquiera hay repuestos para los autobuses que ellos mismos nos vendieron como los Yutong. La empresa encargada de venderlos fue cerrada por orden del ministro Molina y los repuestos fueron trasladados hacia San Felipe, a una nueva institución donde tan solo les venden a las líneas de transporte adscritas al Gobierno, como Transbarca; y dejan por fuera al transporte público, aunque según ellos nuestros nuevo nombre es transporte privado”, expresó Zuleta.
Destacó que el 90 % de los transportistas urbanos utilizan el vehículo Encava, la empresa de autobuses más grande de todo el país. Sin embargo, en una reunión que el sindicato mantuvo con trabajadores de la institución, fueron avisados que el Gobierno no les entregaría divisas para la compra de repuestos y ellos mismos debían buscar los dólares donde fuese, es decir, a través del mercado negro.
Como ejemplo de esto, el transportista de Lara Uno, William Méndez, comentó que se dirigió a la empresa para comprar una correa para su automóvil, que el año pasado costaba 500 bolívares, para su sorpresa el precio de la misma actualmente se ubica en los 24.000 bolívares. Monto que el conductor considera impagable.
Ante la falta de distribución de repuesto por parte del Gobierno nacional y el alto costo de los mismos en el mercado, el 60 % de las unidades de transporte en el estado Lara están paralizadas.
“Pareciera que el Gobierno nacional está interesado en llevar a la quiebra a todos los transportistas del país y suplantarlos, porque ellos se quieren encargar de todo pero tienen que estar conscientes que no pueden operar todo el sistema de transporte en el país”.