Desde las llamadas Boticas Populares, pasando por Farmapatria, 0800-SaludYa y el Sistema Integrado de Acceso a Medicamentos (Siamed); el Gobierno nacional se ha encargado de implementar ciertas políticas en el ámbito farmacéutico para hacerle frente a las deficiencias que se tienen en el sector y que, cada día, se acrecientan más.
Vale la pena recordar el 2003, año en que se inició lo que sería el primer programa de este tipo. Fueron las Boticas Populares las precursoras en el tema. Estas nacieron con la intención de garantizar el acceso a los medicamentos en aquellas poblaciones más necesitadas a precios módicos. El Ejecutivo era el encargado en subsidiar las medicinas incluso en 85 %.
En su misión estaba ofrecer aquellos medicamentos esenciales a un menor costo, dirigido especialmente a las zonas geográficas urbanas y rurales de difícil acceso. Su visión era que las Boticas estuvieran distribuidas de manera estratégica y lograran garantizar la obtención del fármaco de manera confiable, accesible y oportuna.
Con este método también se tenía como meta satisfacer incluso en 80 % las demandas que se tenían en relación a medicinas, especialmente en las áreas desvalidas.
Tiempo más tarde, en el 2012 aproximadamente, decidieron dar a conocer Farmapatria, una red creada para dar respuesta a la especulación en medicamentos que ya desde ese entonces se estaba generando.
Estos establecimientos se desarrollarían junto a las sedes de Mercal y Mercados Bicentenarios. También se instauraron con la misión de vender medicinas a precios asequibles, disminuyendo cerca de un 40 % del precio en comparación con el libre mercado e incluso, aportarían algunas herramientas para personas con discapacidad como sillas de rueda y andaderas. Estas aún funcionan, sin embargo es poco lo que ofrecen según lo constatado por reporteros de EL IMPULSO.
Su dinámica actualmente no es únicamente de aminorar los costos, debido a que llegan a otorgar algunos fármacos de manera totalmente gratuita solo con mostrar el récipe.
Las políticas en este tema no quedaron aquí, por el contrario, continuaron estableciendo algunas nuevas. Para la misma fecha de la implementación de Farmapatria, se inauguraron varios almacenes robotizados, otro mecanismo que combatiría la mala distribución de las medicinas en el país. En esta oportunidad además se dijo que se construirían nueve fábricas de medicamentos que le darían al país la oportunidad de crear cierta independencia de aquellos laboratorios que son los que hasta ahora siguen surtiendo a Venezuela.
El 2015 fue el otro año que vio surgir otro proyecto gubernamental en la materia. Se creó el Sistema Integrado de Acceso a Medicamentos (Siamed), cada vez la tecnología tomaba más fuerza en las ideas del Ejecutivo nacional quien pretendió nuevamente dar solución a la situación que ya en ese entonces estaba resultando crítica.
El “ruleteo” entre establecimientos sería evitado con este sistema el cual incluso obligó a las farmacias a registrarse para poder contribuir con el proyecto. El paciente debía acudir a la farmacia más cercana con el récipe en donde se describía el tratamiento necesario, una vez inscrito este recibiría un mensaje en donde se confirmaría su inscripción, luego sería cuestión de esperar el aviso de que su medicamento había llegado al destino ya pautado. Nuevamente la medida se implementó para garantizar el abastecimiento de los fármacos a los afectados con ciertas patologías, pero no pasó mucho tiempo para que generara desilusión debido a que fue poca la respuesta que se obtuvo.
En el 2016 se creó la línea telefónica 0800- SaludYa, a la cual se llamaría para preguntar la disponibilidad del tratamiento, el operador sería el encargado de verificar la existencia del mismo en la localidad correspondiente, para que así el usuario se dirigiera a la farmacia en donde se tenía la medicina para poder adquirirla.
Fueron al menos cinco las políticas impulsadas por el Gobierno nacional desde el mandato del fallecido presidente Hugo Chávez, sin embargo pocas han quedado en la mente de la ciudadanía por su contribución a la sociedad venezolana.