En los primeros años de la década de los ’60 un grupo de empresarios comprometidos con la democracia recién instalada y en consonancia con los enunciados de desarrollo contenidos en la Constitución de 1961, decide, a través de la Asociación Venezolana de Ejecutivos, crear un instituto de alta capacitación gerencial que impulsara en Venezuela la preparación de ejecutivos a nivel de los países más avanzados del planeta en los aspectos económicos y administrativos.
Esta idea se plasma en 1965 con la creación del Instituto de Estudios Administrativos, el cual se inicia con un programa de becas para profesionales de altas calificaciones, quienes recibieron clases de profesores de Universidades extranjeras con las cuales se firmaron convenios académicos. Estos profesionales venezolanos luego se convertirían en los docentes de postgrado.
Hoy por hoy el IESA es uno de los centros educativos mejor acreditados a nivel mundial y sus títulos son reconocidos en todos los países del llamado Primer Mundo. Está entre los diez institutos mejor clasificados de América Latina y muchos de sus egresados son profesores titulares o invitados de las más prestigiosas universidades de Europa y Estados Unidos.
Constatar esta realidad al mismo tiempo que cruzarla con la excelencia académica de universidades venezolanas como la UCAB y la USB, ganadoras de los tres primeros lugares en una competencia mundial patrocinada por la ONU y celebrada en Harvard, es una noticia maravillosa para el país porque indica de manera clara e indubitable que luego de salir del submundo oclocrata en el que estamos hundidos, tendremos el recurso humano necesario para impulsar a la República de Venezuela a los sitiales de progreso material y ético que merecemos.
Sobre estos temas conversamos con la doctora Isabel Ferrer, coordinadora del IESA en el Estado Lara, en el programa Razón de Peso que se transmite por la señal de Unión Radio Lara, donde también tuvimos la participación del doctor Ramón Piñango,figura emblemática de esta Institución y a quien se le debe una rica obra documental escrita sobre la situación socioeconómica de Venezuela, material insoslayable para cualquier análisis histórico y coyuntural que se quiera hacer sobre el manejo administrativo de nuestro país en las últimas décadas.
Algo muy importante dentro de este contexto de posibilidades de futuro es que el IESA mas allá de su inmejorable desempeño técnico y científico en áreas socioeconómicas, ha demostrado una gran vocación de servicio respecto al destino de Venezuela en el área estrictamente social, compromiso que ha demostrado de manera ejemplar en los momentos que le ha tocado brindar sus aportes al Estado venezolano.
Indudablemente que nuestro país es un reservorio estupendo de recursos minerales, tenemos petróleo, gas, hierro, oro, agua, tierras fértiles, clima envidiable y parajes turísticos de inigualable belleza. Muchos han dicho y otros repetido que para equilibrar tanta bonanza Dios colocó sobre esta geografía maravillosa a un ser humano con carencias básicas para disfrutar estos tesoros. Algo completamente falso. Nuestro único pecado ha sido ofrendar nuestro destino al caudillismo y apostar a ideologías teóricamente hermosas y que en la realidad han resultado ruinosas y criminales. Pero ya no mas, ahora vendrá el tiempo de la inteligencia. Dios diga amén.