La violencia no quiere abandonar la entidad larense. Las cifras negativas siguen creciendo y el homicidio es uno de los dolores de cabeza que tiene los cuerpos de seguridad.
En este segundo mes del año según los registros diarios que lleva El Impulso se registraron 78 muertes violentas en la región. Lo que se traduce a 66 homicidios y 12 personas que fueron abatidas al resistirse a la aprehensión de algún organismos policial.
Entre las resistencias se contabilizaron once casos por procedimientos realizados con el Cicpc y uno con Conas Lara.
De las 78 bajas que se registraron en Lara, 52 fueron perpetradas en Iribarren y 26 en los municipio foráneos. Jiménez lleva la batuta con 7 fallecidos, seguido de Morán con 6 bajas, Palavecino ocupa el tercer lugar con 5 muertes violentas, mientras que Simón Planas fueron 4. Andrés Eloy Blanco y el municipio Torres igualaron con dos víctimas fatales. Mientras que Crespo y Urdaneta no se registraron decesos algunos.
Así mismo en este mes fueron asesinados 7 menores de edad, entre los que destaca dos infanticidios; una pequeña que presuntamente murió en manos de su padre y un bebe de dos años que fue ahorcado junto a su abuela en el municipio Morán.
Fueron tres las mujeres asesinadas
Un taxista, un reo de la comisaría Juan de Villegas I, dos funcionarios entre ellos una PNB y un ex Polilara, también pasaron a formar parte de la lista sangrienta del mes de febrero.
Según los registros de dos a tres personas mueren a diario en Lara de forma violenta y en comparación con el 2016. Cuando febrero cerró con 69 fallecidos, se indica que hubo un aumento de 13, 04 % en cuanto a las muertes violentas en la región.
Con mayor saña
Cabe destacar que los crímenes se caracterizaron por ser cometidos con mayor saña, y es que se consiguieron varios cuerpos en estado de descomposición, algunos que los quemaron, otros a los cuales torturaron. A la final fueron ajusticiados y el denominador común en la mayoría de los casos es que las víctimas fueron raptadas o señalan a funcionarios de cuerpos de seguridad.
Entre los crímenes que llaman la atención de este mes es el asesinado de tres personas miembros de la comunidad LGBTI (Lesbianas, Gays, Bisexuales, Transgeneristas e Intersexuales).
El homicidio de Alexis Enrique Peña Vizcaya (32) conocida como Alexandra o Alexa, la cual fue localizada el 12 de febrero en la vía de Carora, despertó la furia. Miembros de la comunidad LGBTI alzaron sus voces para defender sus derechos, pero no fue suficiente, pues después de ese hecho dos crímenes más se han cometido. En total en el año han ultimado a cuatro gays.
Se registraron tres triples homicidios en la entidad. El primero de ellos en Jiménez cuando tres amigos fueron raptados y posteriormente quemados dentro de un vehículo. En Iribarren se cometió otro en Colinas de La Lucha, zona oeste de la ciudad. Tres jóvenes fueron baleados en múltiples ocasiones.
Uno de los triples crímenes más impactantes fue el 17 de febrero, cuando tres delincuentes ingresaron a la casa de un agricultor en el municipio Morán, a quien asesinaron de un disparo en el pecho. Así mismo y de una forma despiadada también acabaron con la vida de su esposa, a quien colgaron de un mecate, junto a su nietecito de 2 años de edad.
En Lara también hubo un doble homicidio, los jóvenes quienes fueron trabajadores de una droguería, supuestamente fueron raptados, introducidos en la maletera de un vehículo y posteriormente abandonados en la quebrada de El Mamón, donde fueron localizados en estado de descomposición, ellos murieron a causa de un fuerte golpe en la cabeza y posteriormente fueron quemados.
Según los registros que lleva El Impulso en los 59 días que han transcurrido del 2017 han muerto de forma violenta en Lara 164 personas.