En cuestión de días la Policía Nacional Bolivariana (PNB) en el estado Lara, tras la realización de seis procedimientos distintos, ha decomisado más de nueve toneladas de alimentos en condición de acaparamiento, reventa a sobre precio o sin su documentación pertinente. Todo ello, comentaron las autoridades policiales en rueda de prensa, gracias a la colaboración ciudadana que informó de los distintos hechos irregulares.
La información fue divulgada a los medios de comunicación, la mañana de este lunes, por el jefe de la Región Estratégica de Defensa Operacional (Redi) Occidental de la PNB, Luis Alberto Morales Guerrero.
Una de las prácticas policiales, informaron, tuvo lugar en una distribuidora de pollos y embutidos llamada Agrovili, ubicada en el municipio Iribarren.
En los depósitos de estas empresas, el pasado lunes, encontraron una gran cantidad de pasta (6.12 toneladas) y leche en polvo (625 kilogramos), productos importados de Italia y Argentina respectivamente.
“Estamos realizando la investigación pertinente porque estos alimentos solo pueden ser traídos al país por la Corporación Venezolana de Comercio Exterior a través de Corporación de Abastecimiento y Servicios Agrícolas (Casa), es decir, solamente puede ser vendido por Mercales, Pdval y los Clap”, manifestó el general de brigada.
Durante el allanamiento fueron aprehendidos José Gregorio Ortiz Villanueva y Laura de los Ángeles Pérez Barco, quienes serían los gerentes de la compañía.
En Torres fue caraota y mantequilla
En el municipio Torres del estado Lara se llevaron a cabo dos hallazgos de mercancía alimentaria, entre los que destaca la incautación de 1.002 kilogramos de caraotas, las cuales estaban en posesión de Efraín Antonio Chirinos, de 51 años de edad.
Este hombre, según el parte oficial, fue divisado de manera sospechosa cargando sacos hasta una vivienda del sector Agua Salada. Al ser abordado por los pnb, se descubrió que Chirinos no poseía documentación alguna que respaldara tal cantidad de grano, que, además, eran provenientes de Hong Kong, China.
Días antes, en un punto de control cercano a la comisaría de la PNB en Carora, efectivos policiales se hicieron con 107 kilogramos de mantequilla elaborada y distribuida por Lácteos Álvarez, puesto que Erick José Parra Lozada, de 31 años de edad, no presentó permiso sanitario ni facturación durante la requisa a su automóvil.
Asimismo en el municipio Iribarren, específicamente en la avenida Libertador y la avenida Andrés Bello, dieron con 960 kilogramos más de pasta La Especial, así como de 200 kilogramos de azúcar refinada en el Central Azucarero Portuguesa, respectivamente, por irregularidades con la documentación.
Juan Rondón, de 45 años de edad, y Anthony Daniel Sira Páez, de 22, están tras las rejas por estos hechos. En total fueron puestos a la orden del Ministerio Público siete ciudadanos tras los decomisos de alimentos.
Decomisos de envergadura
Este resulta ser el primer decomiso de envergadura que realiza la PNB larense durante este año, luego de un 2016 con varios procedimientos similares.
En mayo del año pasado, policías nacionales dieron con bultos de papel higiénico, jabón en polvo, harina de maíz, azúcar, café, aceite comestible, pasta, toallín, suavizante para ropa; así como cajas de sal, huevos, jabón de barra, limpiador de pocetas, servilletas, desinfectante, crema dental y toallas sanitarias.
En esa ocasión se recuperaron 3.810 productos de primera necesidad que se encontraban acaparados en el interior de una vivienda situada en Pueblo Nuevo, al oeste de la capital larense.
Por su parte, hace aproximadamente seis meses, también lograron confiscar una tonelada de azúcar refinada proveniente de Bolivia, que estaba acaparada en un autolavado ubicado en el centro de Barquisimeto.
Por este hecho, resultó aprehendido Mariano Rafael Querales Reinozo, de 55 años de edad, quien se dedicaba a la reventa y especulación de artículos de la cesta básica.
Casi linchados
Explicó Morales Guerrero que a mediados de mes, mientras policías patrullaban por el banco Mercantil ubicado en la avenida Libertador, a la altura de la Zona Industrial I, divisaron a un grupo de personas que golpeaba sin clemencia a dos sujetos (Deivis José Ramos de 30 y Rafael Antonio Vargas Tua de 32 años), quienes habrían intentado robar a los clientes de la entidad bancaria a las afueras de la misma.
Tras evitar los linchamientos, brindar asistencia y realizar la inspección corporal, a los hombres los vincularon con una arma de fabricación rudimentaria –chopo- y un arma blanca tipo cuchillo.
