Las últimas encuestas publicadas por las empresas Hinterlaces y Datanalisis, siguen mostrando al presidente Nicolás Maduro y su Gobierno en línea descendente, la aprobación del mandato esta en 22%, que al compararlo con el 40% de venezolanos identificados como opositores y los casi 90% de descontentos, hacen casi imposible que el Gobierno pueda mantenerse en el poder más allá de las próximas elecciones, quizás por esto, le huyeron al Referendo Revocatorio y algunos de sus voceros recientemente han manifestado que el 2017 no tiene condiciones para realizar elecciones.
Sin embargo, la situación no es sencilla para los que no estamos de acuerdo con este Gobierno, del 40% de venezolanos que se declaran opositores, solo el 19% está identificado con algún partido político, lo que evidencia una desconfianza hacia las organizaciones políticas y sus líderes, ante esta realidad, nos preguntamos: ¿Cómo ejercer presión social organizada ante un Gobierno que perdió la calle y bajo el amparo de las instituciones del Estado no quiere hacer elecciones?
Lo primero que debemos buscar son las razones por las cuales los venezolanos desconfían de las organizaciones políticas y sus líderes, un amigo con gran experiencia política, me respondió que la causa central fue la siembra en la sociedad de la “anti política”, quizás tenga razón, pero estoy seguro que existen otras causas que ameritan ser estudiadas con la rigurosidad que exige un trabajo científico.
A mi modo de ver y como opinión, pienso que la desconfianza generada hacia la política en general, tiene su respuesta en sus ejecutores, los políticos, a través de sus desacertadas acciones y escándalos de corrupción, han producido una aversión de los venezolanos hacia la política, hecho relevante, porque la política no es únicamente los partidos políticos y sus políticos, según el concepto clásico, la política es el interés y obligación que tienen los ciudadanos sobre la polis, la ciudad, lo público.
Negar la política es negar lo público, lo que es común a todos, la semana pasada escribí sobre el protagonismo que debía tener la Sociedad Civil en el 2017, siendo quizás uno de sus roles más importantes la búsqueda de la confianza política y su equilibrio. Las dos encuestas mencionadas, demuestran en sus resultados que los venezolanos están agotados de la confrontación, el 51% de los encuestados se declaran “Ni-Ni” que son los venezolanos descontentos con la situación, pero sin identificación política entre los bandos en pugna.
Quien logre capitalizar el centro y la confianza de la gente, posiblemente le ira bien en este 2017, al parecer el gobernador del estado Lara lo capto hace meses atrás y sin hacer mucho ruido, viene trabajando en esa línea, quizás esto explique su escalada en las preferencias electorales, especialmente la más grande de todas, los “Ni-Ni”.