Las ventas del gigante tecnológico crecieron de nuevo durante el trimestre que terminó en diciembre pasado, impulsadas en buena medida por la fuerte demanda del iPhone. Apple había reportado una disminución consecutiva en sus ventas durante los últimos tres trimestres.
Las ventas de la compañía fueron de 78.400 millones de dólares para el último trimestre del 2016, un nuevo récord. Apple vendió 78,3 millones de iPhones durante ese periodo, rompiendo su propio récord para el mismo trimestre del año anterior, con 74,8 millones de teléfonos.
Tim Cook, presidente ejecutivo de Apple, asegura que el aumento se debe «sobre todo a la fuerte demanda del iPhone 7 Plus, el modelo más grande y costoso de iPhone».
El periodo de las vacaciones decembrinas suele ser el mejor para Apple, dado que marca el primer trimestre completo tras el lanzamiento del nuevo iPhone, que sale a la venta en septiembre.
Tras la publicación de los resultados, las acciones de la empresa aumentaron casi un 3% este martes.
Las ventas anuales de Apple cayeron en el año fiscal 2016 por primera vez desde el 2001, mientras las ventas del iPhone, que todavía representan la parte más importante del negocio de la empresa, cayeron durante tres trimestres consecutivos.
Muchos analistas han mostrado su preocupación por la saturación del mercado global de teléfonos inteligentes. Los clientes se están demorando cada vez más en reemplazar sus celulares. Y el último modelo del iPhone de Apple es una réplica exacta de los dos modelos anteriores, lo que elimina el deseo de mejoras y actualizaciones.
Se pensaba que el último iPhone daría un golpe contundente en el mercado, tras el retiro masivo de los Galaxy Note7 de Samsung, por el problema con sus baterías que explotaban.
Las ventas de Apple también se vieron impulsadas por el crecimiento de su división de servicios, que incluyen el Apple Pay, el AppleCare y contenido digital. Las ventas de esa división superaron los 7.000 millones de dólares durante el último trimestre del 2016, un 18% más que las del mismo periodo en el año anterior.
De todas maneras, el reporte de Apple tiene algunos detalles preocupantes. Los ingresos por las ventas del iPad cayeron un 22% en comparación con el 2015, y siguen marcando una espiral descendente para ese producto.
Además, las ventas de Apple en China continental, que alguna vez se pensó sería su siguiente mercado más grande, cayeron un 12%.
