•¿Qué hizo Ud. este miércoles feriado, tan atravesado como el día mismo? Yo leí acerca de Ezequiel Zamora -y sin demora- le digo que “ta’ bueno el culantro pero no era para tanto”. El niño que le han enseñado a ser llorón y la mamá que lo pellizca. ¿Cómo va a progresar un país si lo que le promocionamos desde las alturas del poder es la vagancia, la holgazanería, la prontitud de la riqueza fácil? ¡Qué buen ejemplo a no seguir nos dan!
•Los bachaqueros (no solo los de Las Mercedes en Cabudare) son ahora insignes traficantes. Trafican con azúcar, harina, aceite; o sea, todo lo que escasea,y donde llegan dejan su huella (eso sí no escasea): desperdicios humanos y vegetales, hasta que le den el próximo bachaquerazo
•Si algo puede empeorar, por favor, déjeselo a los expertos en la materia. Para ellos, más significa peor. Yo le recomendaría al presidente, para que le oigan sus cadenas de manera diligente, decir lo siguiente: seré breve. Ya acabé. Y se sienta. ¡Ovación de pie!
•Hablando de cadenas, no las tolero. Las presidenciales las detesto, las religiosas son iguales de odiosas; y las del cuello colgar, las detesto igual. Ni Ud. ni yo nacimos para ser encadenados. La esclavitud fue abolida desde más atrás de nuestros abuelos
•Me dice un amigo medio psicólogo, para practicar un poco esa profesión: ”dime Ramoncito, a tu edad ¿cómo te sientes contigo mismo?” Le respondo, sin bajezas: “A estas alturas de mi vida, me siento bien. Y le doy gracias a Dios porque, después de sentarme, también me puedo levantar, sin ayuda de nadie”. Uno tiene que buscar siempre valerse por sí mismo. Si me lo permitiese el Creador iría yo mismo al cementerio a enterrarme, evitándole así la molestia a familiares y amigos
•Es bueno recordarles a todos los candidatos de las próximas elecciones que 90% de los electores no está dispuesto a votar como el restante 10% que los creen ganadores
•El hampón venezolano es tan experto e inteligente que cuando penetra a una casa o edificio a robar, lo primero que hurta son la cámaras de video y las alarmas anti-robos. Y despuesito del hurto, manda a otro raterito a ofertar esa parte de lo robado
•Por cierto, hablando de inseguridad, hoy por hoy (y muy posible, por mañana también si continúa esta revolución “bonita”), al venezolano que madruga ya no se le garantiza, no solo que no va a amanecer más temprano, sino que tampoco va a recoger agua clara; lo que síes que, debido a la oscuridad reinante, él tampoco amanezca
•Sin embargo, no todo es desesperanza. Me escribe mi amigo Nicolás, no el presidente ¡por supuesto!, sino mi lector consecuente Nicolás Gonzales, el de la Orquesta Juvenil, con su mensaje de esperanza no solo para alguien senil (como yo) sino para todo aquel joven o no, con sueños de libertad y de esperanza, parecido al de los Cardenales de Lara, a quienes, si bien es cierto que un Aguila le cortó sus alas, seguirán volando porque siempre habrá una nueva oportunidad. Nos vemos por ahí.
Ramón Querales
[email protected]
