Culminada la temporada del béisbol venezolano, los Tiburones de la Guaira y Leones del Caracas continúan con la intriga sobre dónde jugar como local en la próxima campaña de la Liga Venezolana de Béisbol Profesional (LVBP), debido a que la Fundación UCV, aseguró que los equipos “no honraron los pagos acordados por arrendamiento”.
“Ambos equipos incumplieron sus responsabilidades, no honraron los pagos por concepto de arrendamiento y solo cuando la situación comprometía seriamente la operatividad del estadio y hacía inviables los juegos, hicieron algunos aportes limitados, que es un compromiso estipulado en el contrato de arrendamiento”, expreó Alexis Rivas gerente general de la Fundación UCV.
Rivas explicó que la falta de pagos de ambos conjuntos afectó directamente el servicio que se les daba, tanto a los jugadores como a los fanáticos, debido a que se incumplió con el personal de vigilancia y seguridad, se deterioraron las torres de alumbrado eléctrico, los baños, equipos de bombeo de agua de los dougouts, entre otros.
Esta irresponsabilidad de los equipos, hizo que la directiva de la Fundación UCV, rescindiera de los contratos.
“Queremos lo mejor para el béisbol venezolano. Estamos abiertos a llegar a un nuevo contrato y a velar por el cumplimiento del mismo en pro de todos. El deterioro en el que se encuentra el estadio Universitario es evidente y perjudica no solo a los equipos que juegan como local, sino a los equipos visitantes y lo más importante: a la fanaticada, que al final es quien merece contar con las mejores condiciones para disfrutar del deporte preferido por los venezolanos”, añadió.