Casi dos semanas después del enfrentamiento con el Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas (Cicpc) donde murió César Antonio Guaricuco Cuicas, alias El Cesita, presunto autor del homicidio de Mirlybeth Anaís Reverol Tovar (20), a quien decapitaron el 30 de diciembre del año pasado, funcionarios del mismo organismo de seguridad, específicamente del Eje de Homicidios Lara, abatieron a Ordarvis Eduardo Castillo Álvarez, El Davi, otro de los participantes del ominoso crimen.
Ayer aproximadamente a la 01 de la tarde, en la calle principal de la comunidad Asoprado, al oeste de la capital larense, cerca de la quebrada que pasa por ese sector, cayó moribundo El Davi, cuando encaró a la comisión de investigadores con un arma de fuego.
En el lugar del enfrentamiento los investigadores encontraron como evidencia una escopeta calibre 12 y dos conchas calibre 9 milímetros.
El equipo de detectives llegó a Asoprado en atención a los datos que hasta la fecha han reunido para resolver el caso de la joven de 20 años de edad, a quien violaron y además de cortarle la cabeza y esconder el miembro le hicieron una incisión tan grande como para dejar visibles los órganos.
El Davi, al parecer, puso sus manos al momento de cometer ese homicidio, que para las estadísticas significó la última mujer muerta de forma violenta en 2016. Razón por la cual figuraba como solicitado por el delito de homicidio por el Juez de Control 3 desde el 13 de enero de este año.
Dos menos de cuatro involucrados
Con El Davi y El Cesita se cuentan dos hombres muertos de los cuatro a los cuales se les acusa de participar directa o indirectamente en el asesinato que con saña se cometió aquel día de diciembre en un rancho del sector Renacer Crepuscular.
Otros dos sujetos, el taxista que presuntamente condujo a los criminales hasta la casa de la muchacha y un adolescente de 16 años conocido como Cara e’ Laja, fueron localizados e inmediatamente arrestados por la policía científica, hace semanas.
El crimen contra Reverol Tovar, de acuerdo a los datos recabados en la investigación, lo cometieron como venganza de una traición de Rafael Alberto Peña Torrealba (26), conocido como El Fucho, quien era pareja de la joven.
A Peña lo ultimó El Cesita el 30 de septiembre por haberse apropiado de una cantidad de droga que no les correspondía. Empeñado, al parecer, por recuperar la mercancía fue a buscar a la muchacha y como ella se negó a cooperar la asesinó.
