Así como la iglesia ha sido refugio de la sociedad, esta vez la sociedad civil de Lara junta esfuerzos para orar y pedir por la institución, sus sacerdotes y Venezuela.
Por ello, ayer desde la mañana, feligreses de distintas parroquias de Barquisimeto, se concentraron en la Catedral Metropolitana, a fin de celebrar una jornada de oración por Venezuela, la cual inició con reflexiones y peticiones de los presentes y continuó con el Santo Rosario. Las anécdotas de ciudadanos que se han visto afectados por la situación de Venezuela, como Carmen Guédez, cuyo hijo emigró por la coyuntura país, fueron eje fundamental y razón para pedir en reparación por la iglesia y por los derechos humanos.
Óscar Maldonado, miembro del comité organizador del encuentro, manifestó que la incitativa surgió del llamado que hizo el Arzobispo, Monseñor Antonio José López Castillo, en la procesión 161º de la Divina Pastora, durante la cual el religioso expuso realidades de Venezuela, entre estas, falta de alimento, medicinas y seguridad.
-Debemos pedir por la paz de Venezuela y por el cambio de nosotros como venezolanos. Si no cambiamos, el país no cambiará. Debemos actuar con conciencia y no doblegarnos por conveniencia.
Manifestó que la iglesia católica, representada en todos sus fieles, ha decidido salir a la calle, pacífica pero activamente, para denunciar, como lo hizo Jesucristo, las malas acciones del gobierno.
En este sentido, dijo que la iglesia se expresa de política, en función de una práctica social que se preocupa por los asuntos del Estado y del bien común, pero no por politiquería. Es la primera la que en estos momentos reclama la intervención de los cristianos.
Francisco Urdaneta, también organizador, apuntó que debido a las condiciones económicas, políticas y sociales, los ciudadanos deben buscar libertad y democracia. Deben denunciar y reclamar porque los sistemas se centran en la miseria del ciudadano y no debe ser así.
Sostuvieron que la defensa de los derechos humanos es y siempre ha sido intrínseca a la iglesia católica, que había estado en mutismo, por la prudencia que le caracteriza.
William Luna, Nelson Urdaneta y Roberto Casanova, calificaron el manejo político que se ha dado a la lucha de la iglesia, en la que incluso católicos afectos al gobierno han pronunciado su rechazo, como “una argucia (argumento falso) del régimen para tapar la realidad”.
Invitaron a todos los larenses a orar por Venezuela y a participar el próximo martes 31 de enero, en una marcha que saldrá desde la Catedral y cuyo punto destino, se abstienen a hacer público, a fin de evitar enfrentamientos o altercados con quienes no comprenden la tarea que actualmente tienen la iglesia y sus feligreses.
Acotaron que si bien pueden hacer acto de presencia representantes políticos, la convocatoria es civil y de la iglesia, en defensa de la paz y los derechos humanos.
Será la intervención divina, a través de la fe y la oración, la que propiciará los cambios necesarios.
Apoyo a Monseñor
El grupo de parroquias también levantó un acta, en la cual expresa su apoyo irrestricto al Monseñor Antonio José López Castillo, así como su respaldo por agresiones recibidas.
La colectividad, se sumó con su firma a este documento.
