Juventus, del mediocampista tachirense Tomás Rincón, se deshizo del Milan en un duelo de peso pesados, pizarra 2-1, para cobrar venganza de la derrota sufrida en la final de la Supercopa italiana, disputada a finales de diciembre, y sellar su avance a las semifinales de la actual edición de la Copa Italia.
Massimo Allegri, DT de la “Vecchia Signora”, decidió dejar en el banco de suplentes al volante venezolano, contrario a lo sucedido en el anterior desafío copero ante Atalanta, cuando fue titular y jugó hasta el minuto final. En este caso, el estratega decidió por Miralem Pjanic como acompañante del alemán Sami Khedira, en procura de tener a hombre con mayor vocación ofensiva y la apuesta le dio resultados, porque el bosnio marcó el segundo tanto del múltiple campeón del fútbol italiano, al 21, después que el argentino Paulo Dybala lo adelantase en el mismo arranque (10), en un comienzo de careo arrollador.
En la segunda mitad, Milan adelantó líneas y llegó al descuento por intermedio de Carlos Bacca, con lo que le puso emoción y dramatismo a la recta final del encuentro. Parecía un momento propicio para el ingreso de Rincón, vista la necesidad de la Juve que contener el buen momento del Milan, pero no recibió oportunidad alguna y permaneció todo el encuentro en el banco de suplentes.