El vicepresidente Tareck El Aissami recordó que esta acción económica fue tomada por el Ejecutivo, luego de detectar que casas de cambio colombianas y mafias dirigidas desde el Departamento del Tesoro de Estados Unidos, ejecutaron dicho ataque a la moneda y en total fueron extraídos del país 400 mil millones de bolívares.
-Las casas de cambio van a tener una incidencia directa en la oferta y la demanda de divisas que se genere, porque también están autorizadas, facultadas para la compra de divisas. Es decir que ahora vamos a tener un sistema de protección de la moneda y garantizar la convertibilidad del bolívar-peso, peso-bolívar, en la frontera, sobre todo, precisó.
Explicó que estas operaciones ofrecieron ganancias exorbitantes y lo ejemplificó de la siguiente manera: “100.000 bolívares equivalían en Bogotá a 600.000 pesos. Estos 600.000 pesos en Cúcuta lo llevaban a dólares, el dólar en Cúcuta son 3.000 pesos, eso equivale a cerca de 200 dólares. Esos 200 dólares los vendían en el mercado negro a 3.500 bolívares y se convertía en 600.000 bolívares. Es decir, en una sola vuelta 100.000 bolívares los volvían a traer en 600.000 bolívares”.
Recordó que existe en Colombia la Resolución 8-2000, que establece dos tipos de cambio, uno para la frontera y otro para Bogotá.