Con buen ojo es visto el porvenir de 2017 para el ambulatorio Don Felipe Ponte de Palavecino, a pesar de la crisis por la que atraviesa el sector salud, según señaló el director de la institución, Domingo Verde.
Durante el primer trimestre del año, comentó en entrevista a EL IMPULSO, se estima que el Ejecutivo regional invierta unos 400 millones de bolívares para la culminación y acondicionamiento de la estructura que finalmente convertirá a este centro asistencial en un hospital ante el Ministerio de Salud.
“No hemos subido de rango por las camas, pero esto es un hospital por la magnitud de pacientes que atendemos aquí”.
Dijo que la culminación de la obra permitirá disponer de 135 camas de hospitalización, morgue, unidad de trauma shock y servicio de gastroenterología.
“Estamos como hacinados aquí, pero la apertura nos va a dar la oportunidad de expandirnos”.
De 72 mil palavecinenses que fueron asistidos en el 2015, pasaron a unas 88 mil personas auxiliadas durante 2016 (40 mil emergencias y 28 mil consultas especializadas), explicó Verde, cuando en un ambulatorio común no se ven más de 5 mil ciudadanos.
“La falta de insumos y recursos nos hemos visto limitados pero gracias a los convenios con empresas públicas y privadas podemos dar la atención que un paciente se merece”.
Pese a ello, se jactó de informar que en la Emergencia Obstétrica se ocuparon de 6 mil partos el año pasado.
Asimismo, afirmó que le fueron aprobados 43 mil millones de bolívares (Bs. 1.800 el pasado año).
Sin embargo, cree que será difícil encontrar proveedores que quieran venderle, puesto que los recursos llegan tardíos y la inflación también hará mella.
Persiste déficit de enfermeras
El servicio de enfermería del ambulatorio cerró con un déficit de enfermeras, según las cifras recomendadas por la Organización Mundial de la Salud.
No obstante, se ha logrado disminuir de 270 a 134, con la incorporación de unas 25 profesionales en los últimos días.
Esta deficiencia, declaró el doctor, se observa en todo el país.
Dermatitis por falta de higiene
La falta de artículos de higiene personal y, en los últimos días, el deficiente servicio de agua, ha tenido influencia en los casos de dermatitis por contacto que llegan al ambulatorio.
“No lo tengo como un pico, son entre dos o cinco a diario. Son normales porque la gente se rasca y se rompe o situaciones cotidianas”.