Capaz de imitar a incontables personajes de la política venezolana. Carlos Andrés Pérez, Jaime Lusinchi y Rafael Caldera, cobran vida en la voz de este humorista venezolano. La imitación que más le pide el público es la de Hugo Chávez, por la cual fue señalado a propósito de un supuesto audio que circuló años atrás en el cual el presidente fallecido denunciaba su presunto secuestro.
Se trata de Rolando Salazar, quien desde niño tuvo el talento para imitar a cualquier persona. Una entrevista publicada en el eltiempo.com.ve revela que fue Juan Manuel La Guardia, el célebre “Full Chola”, quien descubrió el don humorístico de Salazar, sin embargo, las puertas de la fama y de Venevisión se las abrió el fallecido Joaquín Riviera, cuando le dio la oportunidad de mostrar sus capacidades en la pantalla chica.
Entre otros de los personajes que imita Salazar se encuentran Henry Ramos Allup, Nicolás Maduro, Oscar Yánez, Sofía Ímber, Claudio Fermín, José Visconti, Julio César Pineda, Delio Amado León, Porfirio Torres y María Corina Machado. Sin duda, uno de los imitadores más versátiles, que sabe aprovechar sus destrezas para cuestionar las sandeces de los líderes políticos, así como la realidad venezolana.
El pasado 24 de diciembre el humorista posteó en su cuenta de Twitter @RolandoSalazar: “A falta de papel regalo, papel moneda y demás papeles, aquí mi regalo virtual, lleno de paz, salud y prosperidad”.
Y ciertamente uno de los papeles que hoy limitan la circulación de tantos medios impresos es el papel periódico, insumo monopolizado por el Gobierno a través de la Corporación Maneiro. A propósito de nuestro tema aniversario A pesar del 13, conversamos con el locutor, quien refirió a través de correo electrónico que ante la adversidad el papel del
humor no viene en rollo ni con olor a jazmín, es un papel participativo y protagónico, pues el humor es ese otro sentido que nos conforma, alforja del alma en el destierro del mal momento.
Al preguntarle si el número 13 tiene un significado para él contestó: “mientras más le descalifican más me crece la devoción por tan buenas coincidencias, como la de Antonio, el Santo de Padua, quien nació el trece de junio y desde los trece años santo de los milagros.
Así resulta otra coincidencia, EL IMPULSO, de ciento trece años; es todo un milagro”.
Pese a la crisis que nos embarga para Salazar lo que resulta imposible es no dejar de reír, por tanto que reír es la respuesta al llanto, es la lucha contra la desesperanza. Sin un rayo de luz, sin ese brillo que el pensamiento se otorga cuando levanta su cara ante la adversidad no somos nada, solo ánimas penitentes en el oscuro rincón de la mezquindad del alma, será posible siempre reír, al igual que sería imposible no llorar.