De la mano de María, en la advocación de la Divina Pastora, la feligresía caminó 7,5 kilómetros con fe y devoción, pero además con el firme propósito de “construir la ciudad espiritual, pastoral, social que todos nos merecemos”, como lo predeterminó la Ruta del Encuentro 2017 ideada por la Arquidiócesis de Barquisimeto con el objetivo de mostrar y fortalecer el “significado espiritual del encuentro con el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo, junto con la Virgen y la Iglesia”.
El pueblo de Dios recibió un mensaje evangelizador en cada tramo de las 14 estaciones lideradas por las zonas pastorales, apostolados, ministerios de música, congregaciones, predicadores y patrocinantes.
1. Cultivar la fe
La fe es un don de Dios que recibimos en el bautismo y un acto humano. “Esta revelación de Dios es la que la Iglesia presenta para creerla, profesarla, celebrarla, vivirla para actuar y orar con ella.
Dicho mensaje fue transmitido por la Pastoral Mariana y la Sociedad Divina Pastora en la iglesia de Santa Rosa, lugar donde se ubicó la primera estación de la Ruta del Encuentro, que llevó por nombre “María en la fe de la Iglesia”. Las actividades en esta tarima iniciaron tempranito, con la llegada de los feligreses que participaron en el Maratón Divina Pastora y quienes acostumbran acompañar a la Virgen desde su salida del templo.
Según el papa Francisco “la fe de María es el cumplimiento de la fe de Israel, en ella está precisamente concentrado todo el camino de aquel pueblo que esperaba la redención, y en este sentido es el modelo de la fe de la Iglesia, que tiene como centro a Cristo, encarnación del amor infinito de Dios”.
2. Esperanza en los corazones
Cantos, oraciones y alabanzas a Dios se escucharon en la segunda estación llamada María en la esperanza de la Iglesia, con la participación de la pastoral Juvenil, la Educativa y la Zona Sagrado Corazón de Jesús junto a la familia Salesiana.
Yurima Gil, directora del Colegio María Auxiliadora, aseguró que la familia Salesiana que representa “entrega al país, a Venezuela, al corazón de la Madre, la que lleva el cayado, la que pacifica”.
Julay Margot Martínez, gerente de la empresa patrocinante CESI, expresó que observó armonía, paz y tranquilidad en la feligresía. Se dijo sorprendida de la cantidad de feligreses.
“Esperanza es lo que debemos sembrar en nuestros corazones, por eso repartiremos unas semillitas como símbolo del crecimiento de la fe, la esperanza y la solidaridad”, detalló Marisela Rodríguez, de la Cofradía de Santa Eduviges.
3. Ejemplos de caridad
Dar sin esperar nada a cambio, amar a Dios sobre todas las cosas y a nuestro prójimo como a sí mismo, así se vive la caridad, resaltada en la tercera estación, patrocinada por la empresa Natulac.
Marcos Barrios, integrante de movimiento católico Proyecto de Amor (Pda), explicó que la caridad es un valor y una virtud teologal. “Aquí reforzamos este valor y explicamos cómo María, siendo hija y sierva de Dios es el mejor ejemplo de caridad, es la que nos lleva a Jesús a través de la humildad que siempre representó. Acá confluimos varios grupos católicos con mucha alegría, para demostrar a todos los asistentes a la procesión cómo se puede ser caritativo”.
La caridad puede darse en lo cotidiano, dijo Barrios, “es posible ser caritativo de alma con sólo brindar ayuda, con dar un saludo, compañía o un abrazo afectivo a quien lo necesite”.
4. El sacramento del bautismo
Desde la cuarta estación la evangelización de la Ruta del Encuentro se centró en la importancia de los sacramentos católicos.
“María, Divina Pastora, ayúdanos a vivir nuestro bautismo” y “Recuerda… vive tu bautismo, eres hijo adoptivo de Dios”, eran los mensajes escritos en los carteles de los integrantes de la Pastoral de Catequesis, del Camino Neocatecumenal y de la Zona Nuestra Señora de Coromoto, respecto al primer sacramento.
A las 11:00 de la mañana ofrecieron un momento de oración, con el rezo del rosario.
“A través de los carteles quisimos transmitir el mensaje a las personas que pasan por aquí”, dijo María Teresa Castellanos de la Pastoral de Catequesis encargada de la cuarta parada llamada María en el sacramento del Bautismo.
5. Crecimiento a través de la confirmación
La confirmación nos une más firmemente a Cristo, este sacramento representa, según el papa Francisco, el crecimiento de la gracia bautismal y conduce a la realización del vínculo con la Iglesia.
Los integrantes de la estación que ofreció mensajes sobre este sacramento esperaban, a las 11:00 de la mañana, que la imagen de la Divina Pastora se acercara al sitio donde estaban ubicados para iniciar las actividades. La tarima fue patrocinada por el Centro Comercial Metrópolis.
“Pertenezco a la Pastoral Arquidiocesana y además de amenizar esta tarima estaremos en la Iglesia Catedral para la llegada de la Virgen. La intención es profundizar sobre la importancia de los sacramentos a lo largo de toda la procesión”, manifestó Eudomar Vargas.
6. Abrazos para estimular la reconciliación
En la quinta estación regalaron muchos abrazos como método para estimular la reconciliación y el buen ánimo en las personas. Su nombre era María en el sacramento de la Reconciliación y estuvo liderada por el Movimiento de la Misericordia, los Cursillos, Encuentros de Hijas e Hijos (HH) y Zona Inmaculada Concepción. La alegría reinó en el ambiente y en los mensajes difundidos.
“Invitamos a la gente a que se reconcilie con el Señor y recordamos que Jesús nos dejó a María como esa madre de unión con la Iglesia católica… el mensaje que llevamos es que ella es reconciliadora y siempre quiere tener a sus hijos en el corazón de Jesucristo”, contó Yarit Ramírez del Movimiento Apostólico de la Misericordia.
Los servidores invitaron a la feligresía a acercarse a la reconciliación, mejor conocida como la confesión, en espacios habilitados para que los sacerdotes ofrecieran este sacramento a los interesados.
7. El carisma de la eucaristía
En la séptima estación se invitó a los feligreses a vivir el carisma de la eucaristía como lo hizo la Virgen María.
“Con su ejemplar vida, al servicio de Jesús y de todo el pueblo, María nos invita a vivir plenamente este sacramento… la eucaristía nos congrega en un mismo espacio para dar gracias a Dios y a la Virgen, por la vida”, manifestó una de las integrantes de los grupos que hicieron vida en esta tarima.
La eucaristía, además de ser un sacramento, es un dogma de fe.
Miriam Maza, de la Unión Eucarística Reparadora, expresó que este misterio va de la mano de María, como la acción de gracias más grande hacia el Padre, con amor. “Viviendo el misterio de la eucaristía nos unimos a la Virgen y a la Santísima Trinidad”. El movimiento Orionista, la parroquia San Antonio de Padua y la parroquia Guadalupe son algunos de los movimientos que participaron.
8. Fortaleza espiritual
Miembros de la parroquia Nuestra Señora del Valle y San Pedro se encontraban en la estación desde las 6:00 de la mañana entregados a anotar las intenciones de cada uno de los enfermos para orar por ellos, hasta el momento cuando la procesión con la imagen de la Divina Pastora pasó frente a ellos. En el mismo sitio, el padre Jesús Lárez se dedicó a administrar el sacramento de la confesión y la unción de los enfermos.
“Cuando las personas reciben oración sienten una gran fortaleza espiritual, ganas de seguir adelante y alegría interior. Eso es algo que la gente necesita porque hay enfermedades que no solamente son físicas, sino que redundan en la parte espiritual; por esa razón la confesión y la unción de los enfermos van de la mano”, expresó Lárez.
Clemencia Prado vive en Barinas y desde hace años asiste a la procesión para cumplir una promesa referente a un problema de salud. En el instante que pasó por el centro de oración sintió una fuerza en su corazón y se acercó a orar y honrar su promesa. “Estoy más que segura que el Señor me bendice y la Divina Pastora intercedió con la gracia de Dios”.
9. Vocación sacerdotal
Los representantes de Dios en la tierra son los sacerdotes. La novena estación tenía como principal función promover las vocaciones sacerdotales.
“Las familias nunca nos hemos planteado qué pasaría si un hijo nuestro se ordenara sacerdote. Debemos promover dentro de la Iglesia católica el amor hacia los presbíteros y la oración de protección para ellos”, indicó Libia Castillo.
De esa manera, los jóvenes fueron instruidos acerca de qué es el sacerdocio y sobre cómo es la vida de los seminaristas por parte de la Pastoral Arquidiocesana, la Pastoral Sacerdotal y el Seminario, a través de habladores y charlas para ganar espacios de evangelización dentro de la procesión.
El padre Gabriel Peña manifestó que esta procesión tiene como peculiaridad la generación de vocaciones sacerdotales, dado que el hecho de caminar con la Madre y compartir con la feligresía genera inquietud vocacional en muchos jóvenes; siendo la misma Divina Pastora quien despierta en muchos de ellos el deseo de ser sacerdotes. “Es importante que cada párroco traiga a su feligresía porque esto enciende”.
10. Matrimonio
La Pastoral Familiar representada por Matrimonios con Cristo animó su estación con cantos, entregando información y haciendo reflexión con oraciones, acerca de lo que es el sacramento del matrimonio y la familia.
Moisés Figueroa destacó la importancia que tiene para el venezolano entender el sacramento del matrimonio, manifestó que el mismo es una gracia muy especial de Dios, bendice la unión y regala innumerables bendiciones dentro de la vida en pareja. “Dios nos ama tanto que a través del sacramento estará en contacto directo con el esposo y la esposa y bendiciendo a la familia entera”.
Lo mismo opina su esposa, Carmen de Figueroa, quien considera que el matrimonio es el estado ideal, siempre y cuando la presencia de Dios esté en sus vidas. “Hay que vivir el sacramento para sentir la presencia de Dios y las bendiciones que tiene destinadas”.
11. Camino cristiano
El objetivo primordial de las estaciones de la Arquidiócesis es promover el sentido real de la visita de la Divina Pastora que comenzó como una procesión, gracias a un milagro que se tradujo en un acto de fe.
Con el pasar de los años, la Iglesia ha buscado que la procesión sea un acto espiritual y de evangelización. Diego Galíndez señaló que en este tiempo la Iglesia debe salir hacia la realidad del mundo. Este año, dentro de la Ruta del Encuentro, fueron promovidos cada uno de los sacramentos y el rol que la Virgen ha jugado en ellos para crecer en la fe y la relación con Dios.
“Resaltamos los frutos del camino cristiano de vivir los sacramentos en la Iglesia y de recibir de parte de Dios las virtudes de fe, esperanza y caridad; reflejo de lo que nuestra Madre vivió en su día a día”.
12. Hermanos en la solidaridad
Actualmente el país pasa por un momento difícil cuando la solidaridad es algo que cuesta practicar, pero para los feligreses la procesión es una oportunidad para encontrarse con hermanos de distintas regiones del país que vienen con devoción a acompañar a la Virgen, apoyándose entre todos, con donaciones y servicios.
La campaña que promocionaba la estación llevaba por nombre ¿Y tú cómo eres solidario?, la cual era una invitación para entregar ideas acerca de la manera de ser solidarios con el hermano y los más necesitados, informó Manuel Villavicencio.
“Cada año queremos contar la historia del porqué hacemos esta procesión y cada persona que participa es una muestra de que Dios está haciendo su trabajo para que seamos más los que acompañamos a la Madre, recordando ese gran milagro que nos hizo”.
13. Promesa y fervor
La hermanita de la congregación Obra Misionera de Jesús María, Wilanys Peña, resaltó no solo la solidaridad sino el servicio que María demostró a lo largo de su vida, desde el momento en que el Ángel le anunció que iba a ser madre y se dirigió donde su prima Isabel que estaba encinta. “La situación económica del país nos ha convertido en egoístas.
Tenemos que ser serviciales y solidarios desde nuestras limitaciones, como ella lo ha sido”.
Como ejemplo de las grandes bendiciones que la Divina Pastora cada año le entrega a sus seguidores, en esta estación se encontraba Ronald Torrealba, un padre de familia que le prometió a la Virgen caminar por diez años junto a su hijo en la procesión, luego de que le salvara la vida al niño al nacer gravemente enfermo.
“Este año finaliza la promesa y quiero darle gracias a la Virgen por su inmensa misericordia y servicio”, expresó entre lágrimas.
14. El bien común
El padre Jesús Ramírez considera que la corresponsabilidad es el fruto más amplio de la Iglesia, es descubrir que todas las personas tienen un lugar, tanto sacerdotes como consagrados, laicos, parejas, jóvenes y abuelos; incluso desde las diferentes profesiones todos tienen un lugar.
“La esencia es que todos desde nuestra labor podamos ser Iglesia y del lugar donde estoy aporto, amo y sirvo a Dios de cierta manera. San Pablo dice que todos somos como un cuerpo y tenemos muchos miembros, pero la cabeza es Jesucristo. El pie no puede decirle a la mano que no la necesita, porque es un trabajo en conjunto como se hace en la Iglesia y cuando algo está mal eso se contagia”.
Agregó que la Iglesia está destinada a hacer el bien que brota desde la corresponsabilidad. Así mismo, recalcó que el camino de la caridad, el amor, la solidaridad y de un nuevo país se nutre del conjunto de aportes que cada persona realiza para el beneficio común.