Zygmunt Bauman, uno de los sociólogos más prominentes y prolíficos de Europa de las últimas décadas, ha fallecido. Tenía 91 años.
Las obras del pensador izquierdista exploraron la fluidez de la identidad en el mundo moderno, el Holocausto, el consumismo y la globalización.
Bauman murió el lunes rodeado de su familia en su casa en Leeds, Inglaterra, según Anna Zejdler-Janiszewska, profesora de filosofía en Varsovia y amigad del sociólogo, cuya esposa le informó del fallecimiento.
Famoso por su enfoque que incorporó la filosofía y otras disciplinas, Bauman fue una firme voz moral a favor de los pobres y desposeídos en un mundo trastocado por la globalización.
Siempre que escribía textos sobre el Holocausto o la globalización, Bauman se enfocaba en la manera como las personas pueden llevar una vida digna mediante decisiones éticas.
Bauman escribió más de 50 libros, entre ellos «Modernity and the Holocaust» (Modernidad y Holocausto), que salió a la venta en 1989 y en el que difiere de muchos otros pensadores que consideraron la barbarie del Holocausto como una ruptura de la modernidad.
Bauman consideró el exterminio de judíos a gran escala como el mero resultado de los pilares de la modernidad, tales como la industrialización y la burocracia racionalizada.
«Fue el mundo racional de la civilización moderna la que hizo concebible el Holocausto», escribió Bauman.
En la década de 1990, Bauman acuñó el término «modernidad líquida» para describir un mundo contemporáneo con una fluidez tal que desarraiga al individuo y lo despoja de cualquier marco de referencia predecible.
En libros como «Liquid Times» (Tiempos líquidos) y «Liquid Modernity» (Modernidad líquida), Bauman exploró la fragilidad de los vínculos humanos en los tiempos actuales y la inseguridad creada por un mundo que cambia de manera constante.
«En una vida líquida moderna no hay lazos permanentes, y cualquiera que forjemos por un tiempo debe carecer de solidez para que cuando cambien las circunstancias pueda deshacerse de nuevo, lo más rápido y sin esfuerzo posible», escribió Bauman.
Cuando informó el lunes a de la muerte de Bauman a amigos en Polonia, la viuda escribió que el pensador se ha ido «a la eternidad líquida».