En el marco de la instalación de la centésima séptima Asamblea Plenaria de la Conferencia Episcopal Venezolana, el Nuncio Apostólico de su Santidad, monseñor Aldo Giordano aseguró que el futuro del diálogo entre el gobierno y la oposición es oscuro.
«Podría escribir una novela sobre el diálogo. Pero de una vez advierto que ese libro reposará en los archivos secretos del Vaticano (…) La Santa Sede participa en el diálogo porque ha sido invitada, tanto por el gobierno como por la oposición. La respuesta de la Santa Sede se ha hecho esperar porque no se veía las condiciones para un diálogo, pero se ha respondido positivamente, cuando en particularmente la MUD tomó la decisión de sentarse con el gobierno, solo cuando estuviese la presencia del Vaticano», recordó.
Opinó que la dificultad del diálogo es la diversidad de visiones que existen internamente, tanto en el gobierno como en la oposición, lo que no permite, a su juicio, un compromiso real de las partes a solucionar los problemas del país.
«Hay distancia en el lenguaje que se usa en las reuniones del diálogo y las declaraciones públicas que siguen inmediatamente después de las reuniones. Sin embargo, durante la realización de este proceso, se han alcanzado acuerdos en áreas neurálgicas que parecían imposibles, y que permitirían resolver los problemas del país”, indicó.
Recalcó que “la historia demuestra que los pueblos recurren al diálogo tarde o temprano. Mejor antes de miles de muertos”.
Giordano recordó que el papa Francisco pidió en su mensaje navideño ‘urbi et orbi’ dar “pasos necesarios con vistas a poner fin a las tensiones. El Papa mismo ha dicho que si una puertita es abierta, vamos y nos metemos por ella para lograr la paz en Venezuela”, dijo.
Para concluir el representante diplomático aseguró que el Vaticano siempre estará dispuesto a mediar en los conflictos y espera que prontamente Venezuela pueda salir adelante.