Con la culminación de la perforación del pozo “La Canoa-1” el 7 de enero de 1936, este sábado se cumplieron 81 años del inicio de la explotación de la Faja Petrolífera del Orinoco (FPO), la mayor acumulación de hidrocarburos del planeta, cuyo potencial supera los 299 mil millones de barriles netos.
De acuerdo con la información, inicialmente las exploraciones en áreas petroleras del país estaban a cargo de consorcios extranjeros como Mobil, Nerón, Dupont Conoco, Amoco, LL&E y Benton de Estados Unidos; la British Petroleum, de Inglaterra; y Repsol, de España, bajo la figura de las asociaciones estratégicas, en las cuales Petróleos de Venezuela (Pdvsa) tenía minoría accionaria y estas empresas transnacionales pagaban apenas 1 % de regalía.
La percepción sobre la faja cambia con el proyecto Magna Reserva, emprendido en 2005, que permitió cuantificar y certificar las reservas de crudo presentes en su territorio.
El 1º de mayo de 2007, el comandante Hugo Chávez concretó la nacionalización de la FPO y de los Convenios de Exploración a Riesgo y Ganancias Compartidas, con la finalidad de poner fin al proceso de privatización de la industria petrolera, que se había iniciado durante la década de los años 90, señala la agencia oficial de noticias.
Esta acción permitió garantizar a la nación una mayoría accionaria de por lo menos 60% en la conformación de las empresas mixtas establecidas para llevar a cabo la exploración, extracción y procesamiento de crudo en esta área de 55 mil kilómetros cuadrados, que comprende los estados Anzoátegui, Monagas, Guárico y Bolívar, y que constituye la reserva más grande de crudo del planeta.