Este sábado se llevo a cabo la centésima séptima Asamblea de la Conferencia Episcopal en las instalaciones de la UCAB en donde Monseñor Diego Padrón hizo un balance sobre la situación país del año 2016.
Padrón tildó al diálogo de fracaso, “No había voluntad sincera de dialogar. La culpa fue de las partes que estaban sentadas que no asumieron el diálogo en función del país y lo consideraron una estrategia política», aseguró que para el gobierno el diálogo fue un mecanismo que les sirvió para ganar tiempo, en relación al referendo revocatorio.
Monseñor cerró con un mensaje de aliento para los venezolanos “En este 2017 no dejemos que nadie nos robe la esperanza. No es momento para alimentar la depresión. No todo está perdido mientras haya una ciudadanía capaz de emprender mejores rumbos. El llamado es para despegar la creatividad solidaria”.