No deseo para mí ni para nadie empezar el año inseguro, problemático, preocupado, desesperanzado o con incertidumbre, pero si así viene nos tocar+a enfrentarlo con optimismo, creatividad y valentía, pues no hay razón para vivir en un constante atropello, de tal manera que no podamos vivir en paz, defendiéndonos de acusaciones o causas injusta, solo por no aceptar o no estar de acuerdo con ideologías que en nada ayudan al progreso, la convivencia y el buen vivir en paz y armonía, como es el deseo de la gran mayoría de nuestro país, donde se exige respeto y todo lo que una nación por sus propios derechos no se le debe coaccionar. El país es de todos y todos debemos respetarlo y hacerlo progresar en una forma simbiótica, nada de quítate tú para ponerme yo; todos debemos aportar hasta donde nos duela, trabajar hasta el cansancio por el bien de la patria.
Portarse bien y hacer valer nuestros derechos no está vedado en ningún país democrático; por ello invito a luchar y a usar nuestra creatividad y nuestro honor en defensa pacífica de lo que nos corresponde, sin temor, conscientes de que Dios premia a quien tiene la razón.
Este lunes 02-01-2017, a las 4:00 de la mañana, cuando escribía este artículo lo hacía con incertidumbre, preocupación, dolor y con un sentimiento profundo, como lo sentimos todos los seres humanos al vernos amenazados, al querer desprendernos de lo que nos ha costado tanto esfuerzo y mantener en una línea la dignidad por donde ya han pasado casi seis generaciones, sin salirse de las formalidades y principios irrenunciables, ni negociables para lo que fue creado, como lo ha sido el Diario EL IMPULSO, Patrimonio de la Región, orgullo nacional, admiración y ejemplo internacional. 113 años no es cualquier cosa, eso se respeta, se le quiere y se le admira, EL IMPULSO es de todos, así lo sentimos y lo decimos con orgullo.
Albert Camus nos dejó un mensaje que no pierde vigencia: “La única manera de lidiar con un mundo libre, que no es libre, es ser tan libre que tu sola existencia sea un acto de rebelión”. No es rebelión de insultos, atropellos, lanzando golpe a lo oscuro; es con amor, fe y coraje que debemos defender por el bien de todos nuestras pertenencias, con derecho a ser originales, con ideas propias y posiciones firmes que contribuyan a la paz, con talento, sin negociar nuestros derechos y el porvenir de nuestros hijos y nietos, de no circular mas EL IMPULSO, que Dios, no lo permita que por supuesto no lo va a permitir, pero en el supuesto negado se sumaría esto a causas muy negativas e injustas. ¿Cuántas familias pasarían a engrosar las tantas calamidades por la que estamos pasando los padres?, ¿cuántos padres, madres, niños, jóvenes estudiantes que se sienten seguro en su trabajo, estarán dispuestos o acostumbrados a que se le cambie la vida?, por Dios, no.
Tremendo problema en todos los sentidos, sobre todo sentimental, por ejemplo: en mi casa, mi familia por supuesto somos muchos ¿cómo se sentirá sin nuestro Diario EL IMPULSO?, lo digo con sentimiento ya que este fue quien me enseño las primeras letras y me creó la adicción a leer, por ello mi invitación a que estemos unidos con nuestro Diario El Impulso, esto es un problema que nos concierne a todos, no olvidemos que todo el que no contribuya a una solución se hace parte del problema.
Ahora más que nunca el campo es la solución, unidos todos por la Paz, la Convivencia, el Respeto y la prosperidad de nuestro país……
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