Personalidades de distintas aéreas del acontecer diario, se han solidarizado con EL IMPULSO desde que se anunciara el cese de circulación por falta de papel el pasado 30 de noviembre.
Uno de ellos es el psicólogo, cuenta cuentos y amigo de esta casa editorial, Romer Peña, quien tomo la iniciativa a través de las redes sociales de hacer una campaña para que los barquisimetanos saquen a flote esa identidad que tienen con el Diario EL IMPULSO, tras el cese de circulación por falta de papel. #ElPapelEsMio es la etiqueta que denomina a esta campaña.
En entrevista telefónica Romer indicó que decidió hacer esta campaña es en agradecimiento que tiene con EL IMPULSO, y básicamente “rescatar la venta de información que nos brinda el periódico desde hace tanto tiempo. En mi carrera ha sido fundamental no solo como artista, si no como ciudadano común. Leer EL IMPULSO es tener la posibilidad de enterarse de todo. No podemos quedarnos tranquilos ante lo que está pasando. Teniendo la posibilidad de hacer algo por más pequeño que sea, se me ocurrió esta campaña, en donde digo que el papel no es de la empresa, no es de lo que trabaja allá. El papel es mío, es de todos los que estamos en la calle, de los que necesitamos medios para informarnos, para hablar, para expresarnos.”
Romer Peña destaca que su relación con EL IMPULSO no data de tiempos recientes cuando ya se ha convertido en una personalidad reconocida por su labor social y su carrera como comediante, cuenta cuentos y psicólogo. Él va más allá. Cuenta que cuando pequeño mientras estaba en sexto grado de educación básica, tenía un profesor llamado Oberto, quien les tenía una tarea en el salón. “Se llamaba el Diario El Lector, era un cuaderno en el cual teníamos que pegar un recorte de prensa en una página y en la siguiente debíamos resumirlo con nuestras propias palabras”.
Destacó que con esta actividad aprendió a leer el periódico y a resumir un artículo de periódico. “Mi mamá me compraba EL IMPULSO y de ahí sacábamos cualquier artículo y hacíamos la tarea. Eso me hizo un lector desde muy niño del periódico. En mi casa había libros, había cuentos, pero el diarismo te daba la oportunidad de mantenerte informado de lo que pasaba, siendo un niño. En esa época para mi resultaba medio fastidioso. Hoy agradezco lo que ese profesor Oberto hizo con nosotros. Porque el Diario El Lector, nos hizo eso, ser lectores a diario de las cosas que pasaban”.
Confesó ser fanático del suplemento juvenil Entre Amigos, un encarte que se mantuvo durante muchos años dedicado a universitarios y adolescentes.
Luego de contar como fue esa conexión con EL IMPULSO en su niñez, ahora le parece increíble ser parte de esta casa editorial. “Tener esa posibilidad de salir en EL IMPULSO, sin tener una tradición artística. Yo llegue a EL IMPULSO por mi trabajo y de inmediato me adopto como un artista de la región y comenzó hacer difusión de mis eventos y de lo que yo hacía de una manera increíble”.
Recordó la primera vez que lo llamaron del periódico para participar en un Desayuno Foro. “El dia que me llamaron para participar me pareció algo indescriptible. Un espacio en donde vi tanta gente clave e importante para la región y me tomaron en cuenta para ello”.
“No solo estoy defendiendo EL IMPULSO como un artista de la región. Lo defiendo como un ciudadano que creció leyendo El IMPULSO y que sabe la importancia de un medio de comunicación de 113 años en la región y no podemos dejar que pase así como si nada”, aseguró Romer Peña.
Finalmente hizo un llamado a los venezolanos a expresarse, a no permitir que cosa como las que hoy le pasan a EL IMPULSO, sucedan. “Porque nos están coartando y nos están cerrando, y cuando nos demos cuentas vamos a estar inmersos en una censura sin precedentes”.