España otorgó la nacionalidad a dos opositores venezolanos, el exdirigente estudiantil preso Yon Goicoechea y el antiguo dueño de la cadena Globovisión Guillermo Zuloaga, quienes habrían sufrido persecución judicial del gobierno de Venezuela, anunció este viernes el Ejecutivo español.
Goicoechea, parte del centenar de «presos políticos» que denuncia la oposición venezolana, «cuenta con una situación familiar y personal arriesgada debido a la persecución política y judicial que padece», explicó la página de internet del gobierno español tras la reunión semanal de su gabinete.
Miembro del partido político Voluntad Popular del líder opositor encarcelado Leopoldo López, Goicoechea fue detenido en agosto pasado por la supuesta posesión de material explosivo.
Tanto la Comisión Interamericana de Derechos Humanos de la OEA como la organización Human Rights Watch han denunciado irregularidades en su proceso judicial, recordó el gobierno español.
Por su parte, Zuloaga «se refugió en Estados Unidos» luego de que el gobierno venezolano, en ese entonces dirigido por Hugo Chávez, iniciara dos procesos penales contra él, en 2009 y en 2010, indicó.
Requerido por la justicia venezolana por los delitos de usura y asociación delictuosa, Zuloaga obtuvo asilo político en 2011 en Estados Unidos.
Hasta que la familia Zuloaga la vendiera en 2013, la cadena privada Globovisión se caracterizó por línea muy crítica hacia el gobierno chavista.
España otorgó también la nacionalidad a los dos hijos y a la nuera de Zuloaga. Los dos venezolanos recibieron la nacionalidad este viernes junto a otros ocho extranjeros mediante «cartas de naturaleza», concedidas cuando «concurren circunstancias excepcionales», explicó el gobierno español.
Las relaciones entre España y Venezuela han sido complicadas desde el gobierno de Hugo Chávez (1999-2013), una tendencia que se mantuvo con su sucesor Nicolás Maduro, quien llegó a acusar al jefe del gobierno español, Mariano Rajoy, de integrar una «conjura internacional» para derrocarlo.