El presidente Nicolás Maduro anunció el jueves su decisión de prorrogar el cierre de la frontera con Colombia por 72 horas más y de extender la medida a la de Brasil por los próximos tres días para evitar el contrabando de billetes de 100 bolívares, que representan más de la mitad del efectivo que circula en la inflacionaria economía de Venezuela.
“He decidido, así se está comunicando al gobierno de Colombia y a las autoridades fronterizas del Brasil, prorrogar el cierre de la frontera, con estricta cooperación militar y policial, 72 horas más” para culminar la fase del canje masivo de billetes de 100 bolívares, dijo el mandatario en una alocución transmitida el jueves en la noche por la televisión estatal.
La medida busca frenar el ingreso de billetes de 100 bolívares al país, que son los de mayor denominación y que el gobierno decidió sacar de circulación en su totalidad a más tardar el 20 de diciembre.
A partir del viernes se abrirá un plazo de cinco días -la mitad de lo previsto originalmente- para que los tenedores de billetes de 100 bolívares, entre los que se incluyen los bancos y los miembros de otros sectores económicos del país, realicen su declaración y depósito en las sedes del Banco Central de Venezuela y las entidades financieras que se designen para ese fin, agregó.
“He cambiado el decreto y de 10 días lo hemos cambiado a cinco por recomendación del equipo de trabajo. Cinco días a partir de mañana viernes”, acotó el gobernante.
Maduro justificó la decisión bajo el argumento de que el país es víctima de un ataque dirigido por “mafias” que utilizan los billetes de mayor denominación para el contrabando de moneda.
Como parte de las acciones para combatir ese delito y reducir el uso de papel moneda, las autoridades acordaron además una rebaja de 2% en el impuesto al valor agregado a las transacciones electrónicas para estimular esas operaciones y reducir los pagos con efectivo.
Una burla
“¡No entiendo cuál es el chiste! Cuando retiras efectivo de los cajeros automáticos te da billetes de 100 y dentro de la agencia tampoco están los nuevos”, decía con enojo Yarelis Carrero, una oficinista que a primera hora de la mañana fue a una sucursal del este de Caracas para depositar sus últimos billetes de cien.
“Nadie ha visto los nuevos todavía, un transportista de valores que conozco me dijo que ellos tampoco los han visto ¡Puras mentiras!”, manifestó Saúl Bernal en la fila del banco.
Las gasolineras también tenían largas colas este jueves. El analista Henkel García graficaba así la imagen: “Pensamiento simulado: Ajá, no he visto un billete de 500 y no tengo de 50. ¿Cómo echo gasolina mañana? Mejor echo hoy”.