Al amanecer de este miércoles, Alejandro “Lobo” Guerra asumirá sus primeros minutos en el Mundial de Clubes que tiene lugar en Japón, como ficha del Atlético Nacional de Medellín, campeón de la Copa Libertadores, que enfrenta al Kashima Antlers en las semifinales del torneo.
El duelo entre el club colombiano y el japonés está programado para jugarse en el estadio Suita City, desde las 6 y 30 de la mañana, hora de Venezuela.
En juego está el pase a la gran final del máximo certamen de equipos, en procura del rival para la llave que mañana disputarán Real Madrid y América de México, con el conjunto merengue como claro favorito.
Según informaciones divulgadas por la prensa que hace cobertura del torneo, el venezolano, pieza clave en el esquema de Reinaldo Rueda, dejó atrás molestias que le impidieron participar en el último juego de su club en la liga colombiana y está listo para entrar al campo, incluso como titular.
Al pisar el terreno de juego, el caraqueño se convertirá en el segundo venezolano en tomar parte en un Mundial de Clubes, después del guayanés Jeffren Suárez, quien participó con el Barcelona en la edición de 2009.
“Soñé fue con jugar un Mundial de selecciones. Pero voy a aprovechar la oportunidad de este Mundial de Clubes”, señaló Guerra ante de su viaje a Japón, de acuerdo con el portal Grada Digital.
Estudiantes por el pase
Mientras en suelo japonés Alejandro Guerra busca cubrirse de gloria, en Uruguay el equipo Estudiantes de Guárico procura prolongar su invicto para anotarse en las semifinales de la Copa Libertadores femenina, al enfrentar a Colo Colo de Chile en la tercera y última jornada del grupo C.
El careo está programado para jugarse desde las 4 y 30 de la tarde, con las criollas necesitadas de un empate como mínimo para pasar a semifinales.
La oncena guariqueña dominó sus dos partidos previos, ante Unión Española y Ferroviaria, en ambos casos 1-0 y con goles de la estelar Ysaura Viso, para llegar a la última fecha de la primera fase como líder de su llave, dos puntos por encima del elenco chileno, al que debe contener para no quedarse sin el boleto a la siguiente fase.