Virtualmente, Cardenales está en enero. 30 triunfos el 9 de diciembre son como para regodearse. Se detuvo al rival cercano de manera contundente, con blanqueo y paliza, 8-0. Como está la tabla, la postemporada es casi un hecho, a falta de once partidos por celebrar.
Lara se ha transformado en un escuadrón explosivo, de innings grandes. Anoche no dejó pensar al Zulia, enviando nueve al plato en un primer capítulo de cuatro anotaciones frente al quisqueyano Montero. Ildemaro Vargas, Juniel Querecuto y Paulo Orlando están circulando a placer por las bases, dejándole el trabajo productivo a los maderos de Montero y Rivero. Del primero al tercer tramo, los pájaros rojos conectaron once de sus doce indiscutibles, uno de ellos el cuadrangular trepidante de Montero al center-right, una conexión que recorrió algo así como 430 pies a la mano contraria del bateador.
Entre los cinco primeros de la alineación sonaron diez cohetes y estuvieron trece veces en las almohadillas. Juniel Querecuto resultó figura destacada al ligar cuatro petardos por tercera vez en la temporada. Ese daño fue suficiente y Lara del tercero en adelante solo despachó un hit. Néstor Molina recorrió seis y un tercio de episodios, hasta que una línea de Brian Flete dio en su cuerpo. La ventaja le concedió la posibilidad de lanzar sin presión alguna, recetando curvas, cambios y sinkers. El control mejoró mucho.
Llegó al encuentro con 20 boletos en 40 entradas, pero ayer no entregó transferencias. Urshela le tronó doblete con dos outs en el primero y de allí en adelante retiró 15 en línea hasta cubrir un out del séptimo inning, el único episodio donde Zulia embasó a dos.
La amplia diferencia permitió volver a ver a David Goforth, tirador que debe ayudar mucho en lo que resta de camino. El noveno estuvo a cargo del dominicano José Cisneros, ya con la banca zuliana en el terreno. Cardenales afronta un calendario muy cómodo hasta el final de la campaña regular. De hecho descansará dos días antes de encarar al Caracas y luego habrá otras dos fechas de reposo. Este año la Navidad será distinta para los pájaros rojos.