Un atacante suicida dejó 45 soldados muertos y 50 heridos el sábado en una base del ejército yemení en la ciudad sureña de Adén, informaron funcionarios de seguridad.
El extremista detonó un cinturón con explosivos en medio de cientos de soldados que hacían fila para cobrar sus cheques en la base Solban, dijeron las fuentes, que hablaron bajo condición del anonimato porque no estaban autorizados para hablar con la prensa.
El soldado Waleed Rashed llegó al lugar poco después de la explosión y vio que había cuerpos y sangre en el suelo. «Podía escuchar a los soldados heridos pidiendo ayuda a gritos», dijo.
Se usaron autos particulares para llevar a los heridos a hospitales antes de la llegada de ambulancias, agregó.
Nadie reivindicó inmediatamente el ataque, que tenía las características de los efectuados por Al Qaeda. Desde hace años, la red terrorista ha concretado varios atentados fatales en Adén, enfocándose en los militares.
Se cree que la filial de la red terrorista en Yemen es la más activa del mundo. Se sabe que está en Adén, donde una coalición de soldados leales al gobierno del presidente Abed Rabbo Mansour Hadi milicianos locales y grupos yihadistas controla la ciudad.
Los soldados y los grupos yihadistas están combatiendo a los rebeldes chiíes, que en 2014 tomaron la capital Saná y luego arrasaron con gran parte del norte de Yemen. Sus avances obligaron a Hadi _cuyo gobierno todavía es reconocido internacionalmente_ a huir del país y buscar refugio en la vecina Arabia Saudí.
Una coalición encabezada por Arabia Saudí, mayormente formada por países del Golfo Pérsico, intervino después en Yemen, lanzando una campaña aérea para castigar a los rebeldes y sus aliados.
