El ingeniero químico Ciro Zaá, quien fuera dirigente de Copei y posteriormente ministro de Transporte y Comunicaciones durante los años 1994-1995, durante el segundo período presidencial de Rafael Caldera, falleció el miércoles en un accidente de tránsito registrado en Barcelona, España, donde se encontraba residiendo desde hacía varios años.
Ciro Zaá, quien tenía 66 años, nació en Valle de la Pascua y allí cursó la primaria. Luego se fue a Caracas para estudiar en la Escuela Técnica Industrial.
Desde muy joven ingresó a la política, militando en la Juventud Revolucioanria Copeyana y llegó a ser el secretario juvenil de esa organización política. Derrotó en nuestro estado a Antero Alvarado, que era el candidato de Rafael Andrés Montes de Oca; pero, perdió la secretaría juvenil nacional frente a Agustín Berríos, candidato del herrerismo.
Conviene señalar que cuando se vino de Caracas a Barquisimeto, lo hizo para estudiar en la Universidad Politécnica, donde en 1976 egresó como ingeniero químico.
En 1978 llegó a ser diputado a la Asamblea Legislativa, donde presidió la comisión de obras públicas y la sub dirección de la fracción de su partido en la cámara de diputados regionales.
En 1981 fue designado por el comité regional, secretario de formación y doctrina.
Dentro de su partido se dijo que hizo alianza con Miguel Díaz Sánchez para compartir la dirección de la organización en el estado. Llegó a la presidencia del comité regional de Copei en Lara y fue muy polémico.
En un foro que le hizo José Ángel Ocanto en octubre de 1984 afirmó no haber llegado a acuerdo con la “rosca” para la elección de los organismos funcionales. “Hay dirigentes que apuestan muy fuerte a un enfrentamiento de ya entre el secretario general (Miguel Díaz) y yo”. Y agregaba que no le temía a la heterogeneidad que en ese momento estaba presente en el comité regional. Y pregonaba que “impartir líneas a la base es actuar como un caudillo de poca monta”.
Estremeció a su organización política cuando en enero de 1985 declaró que “ha llegado la hora de de expular de sus filas al ex Presidente Luis Herrera Campins” cuando se formó una polémica entre éste y Rafael Caldera.
Cuando Caldera llegó a la presidencia para su segundo mandato fue nombrado ministro de Transporte y Comunicaciones.
Su muerte sorpresiva se produjo en España, donde residía.
