Zozobra y caos describen la escena de entidades bancarias y comercios en Barquisimeto.
A la crisis del dinero en efectivo, que se ha extendido por varios días sobre la ciudad, se suma la amenaza de fiscalizaciones en el sector comercial, lo que angustia aún más al gremio, durante una época que se supone es la mejor en ventas.
Al realizar un recorrido por el centro de la ciudad, se pudo constatar las largas colas en los bancos y lo desolado del comercio, cuya movilidad, describen sus representantes, como las más baja de la historia.
Servicios limitados en bancos
Acudir a un banco es toda una odisea, no sólo por tratarse de época decembrina, sino por lo limitado del servicio.
Miye Luna, es una dama de la tercera edad, que por segundo día consecutivo acudió este martes a una entidad bancaria, ya que en una oportunidad anterior “el Banco de Venezuela de la avenida Vargas se quedó sin dinero”.
Otra dama que prefirió mantener su identidad en anonimato, sostuvo que acudiría dos o tres veces más, en la semana, al banco, a fin de obtener más dinero en efectivo, debido a que Bs. 10.000, que es el límite de entrega impuesto en algunas taquillas, “sólo alcanza para comprar tres harinas de maíz a precio de bachaquero”.
Esperan que el servicio mejore a partir del 15 de diciembre con la emisión de los nuevos billetes.
Las colas fuera de las entidades bancarias son largas. No sólo porque los adultos mayores acudan a las entidades para devengar el pago de su pensión, sino también por la falta de dinero en efectivo e incluso material bancario básico como tarjetas electrónicas, chequeras y libretas.
Tal y como ocurrió ayer en una de las sedes del Banco Bicentenario del centro de la ciudad, donde a las 11:00 de la mañana usuarios que deseaban realizar el cambio en alguno de estos tres instrumentos, permanecían en una cola, fuera de la institución, esperando a ser atendidos.
A esta misma sucursal se habrían apersonado aproximadamente a las 9:00 de la mañana, según comentarios del público, funcionarios del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin), pero “se asomaron y se fueron”, sin mayor efecto. Esta información coincidiría con rumores de una supuesta fiscalización a entidades bancarias.
Sin embargo, al consultar sobre este respecto a personal de Banco Provincial, entidad privada, aseguraron no tener conocimiento sobre una posible fiscalización y que hasta este martes la sucursal no había sido notificada.
Fiscalización del comercio
Tras fiscalización del Superintendente Nacional de Precios Justos, William Contreras, en Caracas, el comercio larense amaneció en medio de zozobras y angustias, por lo que sería una orden directa de bajar los precios de productos.
Al respecto, fue consultada la presidenta de la Cámara de Comercio de Lara, Rita Betancourt, quien indicó que hasta este martes no habían recibido notificación de que algún comercio formal fuese fiscalizado. No obstante, criticó la manera cómo ocurrieron las fiscalizaciones en la capital, según se ha observado a través de medios de comunicación.
-No sería la manera como se deben hacer las cosas, porque para eso hay una Ley de Precios Justos, que también nos protege como comerciantes y que establece porcentajes de ganancias, sobre el monto en que se adquirió el artículo para la venta… Para eso el empresario lleva su contabilidad. Me parece innecesario que se le obligue a un comerciante a bajar sus precios porque sí. Deberían primero revisar y luego actuar.
Subrayó que el sector comercio formal ha demostrado ser responsable y que se mantiene activo por compromiso con el país.
Datos
Inspecciones realizadas por la Sundee en Caracas, “para frenar el remarcaje de precios”, representaron rebajas en precios que oscilaron entre el 30% y 50%.
La fiscalización está dirigida a tiendas de ropa y juguetes, artículos de alta demanda para la Navidad.
Funcionarios encargados de la inspección denunciaron que el precio de venta y reportes de sistemas automatizados no coinciden en múltiples casos.