La urgencia de aplicar en el país una unificación cambiaria, así como la legalización de un mercado paralelo, propone el economista y asesor financiero internacional, Alejandro Grisanti, al ser consultado en torno a lo que viene ocurriendo en los últimos meses con el tipo de cambio en Venezuela.
Recomienda volver a lo que fue la política económica de Chávez, 2003-2010, admitiendo que no es lo que él avala como economista, tampoco lo que le parece que es lo correcto, habría que llegar un poco más allá, pero que permitiría evitar un diferencial cambiario que no sobrepase dos y tres veces el valor real de la divisa.
Señala que se debe lograr que haya una libre demanda y oferta de divisas en el país, y que la fijación del tipo de cambio sea producto de un mercado de divisas, evitando las distorsiones que hoy existen, donde todos los venezolanos se meten en una página web para ver a cuánto está el dólar.
Grisanti emplaza al Banco Central de Venezuela a asumir su rol de suministrar la información, tal como está establecido en la normativa de la institución, no solo sobre los niveles de inflación, sino también sobre el comportamiento de la economía y sobre los índices de escasez y desabastecimiento.