No descansan ni dan respiro los funcionarios del Comando Nacional Antiextorsión y Secuestro (Conas) de la Guardia Nacional en el estado Lara, que llevan el caso de la banda de El Bachaco, y ahora tienen la mira puesta en tres criminales que mantenían contacto cercano con Ruperto de Jesús Saavedra, quien tenía planeado convertirse en una leyenda criminal venezolana.
Estos sujetos actúan de la misma manera que él lo hacía en Humocaro Alto.
Uno de ellos es Alfredo José Pérez, apodado El Guariquito, a otro le dicen Pánfilo y el tercero se llama Carlos Chávez.
Los individuos aprovecharon la caída de El Bachaco en Cumaná para desplegarse en Guarico, municipio Morán del estado Lara, y someter a los agricultores del pueblo.
En contra de estos sujetos habría más de seis denuncias en el Conas, pues, liderados por Pánfilo y siguiendo los pasos de El Bachaco, estarían exigiendo 3 millones de bolívares para no agredir físicamente a sus víctimas.
Son considerados de alta peligrosidad y según reveló una fuente militar vinculada a las investigaciones, este grupo de hampones también tiene conexión con el delincuente que planificó el hurto de un fusil AK–103, con tres cargadores, de la sección de Inteligencia del Comando de Zona 12 de la GNB en el mes de octubre.
Asimismo, los efectivos militares se encuentran tras la pista de Charango, otro de los discípulos de El Bachaco. Del grupo delictivo quedan como ocho individuos en las calles.
No quieren El Bachaco en su guarida
Por causar tanto daño en la población de Humocaro, en el pueblo que se desempeñó criminalmente no quieren el cadáver de Ruperto de Jesús.
Hasta ahora no se tiene información sobre el ingreso de los restos de El Bachaco al estado Lara y los familiares, también extorsionadores, de Saavedra habría huido de la localidad para esconderse de las autoridades.
