El descontento laboral que no es atendido por las instituciones ni por el patrono impulsó al Sindicato de Trabajadores de P&G a acudir este martes a la Defensoría del Pueblo, a fin de solicitar su intermediación en el conflicto con la empresa.
En el lugar no se encontraba la defensora, Elba Iris Rodil, sin embargo, los representantes de la masa laboral hicieron entrega formal de un escrito en el cual explican moras en la contratación colectiva, casos de abuso laboral y otros.
Henry Carucí, presidente del sindicato, explicó que la preocupación de los trabajadores surge de la falta de respuesta del patrono, ya que el contrato se habría vencido el pasado 28 de febrero y aún no ha habido una propuesta favorable para ambas partes. Rechazan que la empresa plantee ajustar solo 24%, mientras que el salario mínimo nacional ha registrado aumento del 181% integral.
Subrayó que han acudido a ocho reuniones con el patrono, en la Inspectoría del Trabajo, pero no ha habido mayores avances al respecto, por lo que también solicitan a entidades gubernamentales cumplir con su rol en defensa de la justicia y los ciudadanos.
Condiciones productivas
Carucí recordó que los precios de venta al público de los productos P&G han incrementado considerablemente, lo cual no se ha visto reflejado en tabuladores de pago.
La crisis económica ha afectado los esquemas de pago y muchos trabajadores devengan menos del salario mínimo, sumado a que ha aumentado la carga laboral de los empleados, ya que debido a la renuncia de numerosos trabajadores, a quienes les ofrecen arreglos de hasta seis veces lo correspondiente, quienes aún prestan servicios en la empresa, deben cumplir múltiples labores. Además, son movidos de sus cargos, sin respetarse contratos o definición de los cargos para los que fueron contratados.
El presidente del sindicato explicó que de la nómina fija de 850 empleados, actualmente solo laboran 550 y que la nómina tercerizada, cuyos derechos también han sido violentados, ha pasado de 376 trabajadores a solo 130 activos.
Sobre los niveles productivos detalló que en promedio laboran a un 40% de la capacidad operativa. Anteriormente producían 15 millones de kilogramos de detergente por mes, pero en la actualidad la cifra se ha reducido a 800.000 kilogramos, lo que produce escasez en el mercado.
Dicen estar dispuestos a trabajar para incrementar los niveles productivos, ya que la empresa contaría con equipos y materias primas para ello, aunque la recepción de estas no sería periódica.
Sostuvo que al conversar el punto con la gerencia, esta habría justificado los niveles productivos en una “optimización de las materias”, ya que no saben cuándo recibirán de nuevo.
En este sentido, recordó que desde enero de 2015 la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) hace presencia las 24 horas del día en la planta y que representantes de la Zona Operativa de Defensa Integral (ZODI) también estarían en la empresa, como parte del Plan Abastecimiento Soberano. A ambas figuras solicitan intermediar en la dotación de materias con las entidades correspondientes (públicas o privadas), a fin de que la empresa no limite su producción, para abastecer en la mayor medida posible al mercado y mantenerse operativos.