Las estaciones de venta de combustible de Uruguay comenzaron el lunes una huelga de 48 horas en protesta por un plan que busca modificar sus márgenes de ganancias para mejorar el déficit financiero de la petrolera estatal.
En un comunicado difundido a través de la prensa el gremio que reúne a los dueños de las estaciones de servicio sostuvo que «las pérdidas de Ancap durante los últimos años, que tanto alarman, no fueron provocadas por este sector».
En una conferencia de prensa el gobierno retrucó al sindicato al señalar que los dueños de los puestos de combustible tienen en Uruguay una ganancia muy superior a la de otros países.
«El ingreso que reciben las estaciones de servicio por litro de combustible vendido supera ampliamente los valores de la región», dijo la presidenta de Ancap, Marta Jara. Agregó que la ganancia por litro vendido es de entre 35% y 40%, más que en Brasil y más del doble que en Argentina.
«Está muy bien que los empresarios ganen dinero pero no debe ser el Estado el que garantice una rentabilidad desproporcionada», sostuvo Jara y amenazó con sancionar a los huelguistas.
Ancap busca reducir su déficit anual en 36 millones de dólares mediante un nuevo sistema de distribución que disminuye los márgenes de ganancia de los puestos que venden más combustible.
Jorge Bonino, secretario general del gremio de estacioneros, dijo a radio Universal que «este sistema lo único que busca es apropiarse de dinero de la distribución, para beneficio de Ancap, mientras Ancap sigue siendo ineficiente, sigue sin mejorar sus procesos».
Según los informes mensuales que elabora la consultora SEG Ingeniería, los uruguayos pagan el combustible más caro de la región.
En marzo el Parlamento aprobó una inyección de capital por 872 millones de dólares para Ancap, la mayor empresa del país, para que no quebrara. Los balances de la empresa durante el gobierno de José Mujica (2010-2015) arrojaron cientos de millones de dólares de pérdidas.
Las cuentas de la empresa pública están siendo investigadas por la justicia tras una denuncia conjunta de los tres principales partidos de la oposición. El presidente de la compañía durante el gobierno de Mujica fue Raúl Sendic, actual vicepresidente y titular del Parlamento.
Ancap tiene el monopolio de la importación y refinación del petróleo en Uruguay. A pesar de múltiples intentos, nunca descubrió un yacimiento en el país.