El papa Francisco criticó el sábado lo que describió como un auge de la polarización en el mundo, en una ceremonia en la que recibió a 17 nuevos cardenales de cinco continentes.
Durante una ceremonia el sábado en la basílica de San Pedro para investir formalmente a los prelados, Francisco lamentó que se vea cada vez más a inmigrantes, refugiados y personas de diferentes razas o confesiones como enemigos.
El papa advirtió en tono sombrío contra aquellos que quieren «levantar muros, construir barreras y etiquetar a la gente».
«Vivimos en un tiempo en el que la polarización y la exclusión florecen y se consideran como la única forma de resolver conflictos», dijo en su homilía.
Entre los nuevos cardenales que prometieron lealtad al papa había religiosos de África, Asia, Oceanía y América del Norte y del Sur. Sus países de origen incluían Papúa Nueva Guinea, Albania, Mauricio y Lesotho, Malasia, Venezuela, México y Estados Unidos.