Jonathan Martín, Berta Guevara y Yorman Aguilar son trabajadores informales del sector Santa Elena, avenida Bélgica, entre Capanaparo y Caroní, llevan 15 años laborando en este sector y, según sus declaraciones, nunca habían tenido problemas con los vecinos de la comunidad; al contrario, además de poseer la aprobación por el consejo comunal de Fundalara y Santa Rosa, por la fundación de la escuela de béisbol, por los trabajadores del comercio formal que cohabitan en la zona, por la jefa de parroquia, entre otros; manifiestan que aquellos siempre se han mostrado satisfechos con los productos que distribuyen, con su estancia en la zona, con la atención y con los precios.
No obstante, “en la actualidad sus derechos como trabajadores se están viendo vulnerados por prácticas de acoso y amedrentamiento ejercidas por el director de la Zona de Defensa Integral (ZODI), general Rafael Torrealba Pérez, que ahora es vecino del sector”. Así lo comenta el representante de los trabajadores de la economía informal en el este de Barquisimeto, Luis Guzmán, al visitar la sede de EL IMPULSO y denunciar las irregularidades.
“Esta problemática se viene presentado desde hace dos meses atrás, pero ya nos tiene cansados, ya ha traspasado todos los límites (…) constantemente efectivos de la GNB se avocan a la zona e intentan desalojarnos sin razón alguna, lo único que dicen es que son órdenes del general Torrealba, que debemos irnos de allí y hasta han caído en abusos, daños y perjuicios hacia nuestra persona”, así narra Guevara para reforzar las declaraciones de Guzmán.
Ante esta situación, los afectados se manifestaron inconformes y definieron las prácticas como “abuso de poder, sin fundamento y malintencionadas, solo porque al general, no le place su presencia en la zona”. Las denuncias ya han sido presentadas ante los entes competentes, y por cuatro oportunidades han solicitado reuniones al despacho de Torrealba, pero no han obtenido respuestas positivas, informaron.
“Nosotros lo que queremos es que nos dejen trabajar, que el general del ZODI nos dé la cara y nos explique por qué quiere desalojarnos de la zona. Eso, y que los entes encargados de la administración de los espacios públicos en la alcaldía nos ayude a canalizar la situación, es lo único que pedimos”, puntualizó Martín, quien tiene un kiosco de pescadería en el sector.
Ahora bien, por su parte Daniel Peñaloza, director de la Dirección de Planificación y Control Urbano de la alcaldía de Iribarren, indicó que tienen conocimiento de la situación, pero que se escapa de sus manos poder resolverla. “Lo único que podemos hacer, y que ya hemos hecho, es canalizar la denuncia ante los entes competentes para que los afectados sean atendidos como corresponde y el problema sea resuelto de la mejor manera”, indicó. Por lo pronto, se espera que el general Torrealba dé una respuesta oportuna a los trabajadores pues, de lo contrario, aquellos iniciarán actividades de calle para exigir sus derechos y hacer respetar la ley, informó Guzmán.
