Un jonron del experimentado Oscar Salazar en rol de emergente cambió la historia del compromiso en el séptimo episodio y empujó a los Bravos de Margarita a una conquista por la vía de la remontada 3-2 frente a los Leones del Caracas, que hasta entonces tejían una blanqueada, en cerrado duelo desarrollado en el estadio Nueva Esparta de la región insular.
El piloto Henry Blanco echó mano de Salazar desde el banco al ver que el mánager contrario, Alfredo Pedrique, llamó desde el bullpen al zurdo Víctor Gárate para enfrentar a Junior Sosa, bateador de la mano equivocada.
El veterano toletero respondió con un batazo a las gradas que produjo un trío de anotaciones y puso a los margariteños en ruta a su segundo triunfo corrido sobre los melenudos y décimo séptimo en la sumatoria de la campaña.
Mientras la novena isleña navega cómoda en posiciones de privilegio –segunda plaza, a juego y medio del liderato- la tropa caraqueña continúa su viaje en mar picado, con su cuarto revés de la semana y décimo octavo de la temporada, enterrada en el foso de la clasificación.
Así las cosas, Margarita echó por tierra el buen trabajo monticular de Frank López, que se lució con cinco innings y un poco más, una jornada luego de que Luis Díaz, otro de los brazos del Caracas, fuese vapuleado con cinco rayitas en dos y un tercio. López toleró apenas cuatro indiscutibles, aunque se metió en problemas con trío de pasaportes, pero siempre encontró la manera de salir del atolladero.
Pedrique se lo llevó en el quinto, después que sacase dos outs, y le dio la responsabilidad a Jesús Pirela, quien retiró al último bateador de la entrada, pero en el séptimo toleró sencillos de Cade Gotta y Joshua López, antes de que fuese retirado del morrito, sustituido por Gárate, víctima del decisivo jonrón de Salazar.
En el bando insular abrió Nick Greenwood para completar una aceptable faena de cinco tramos de seis hits y dos anotaciones. Cuando se marchó, la pizarra le era adversa 2-0.
Caracas le marcó la primera en el cuarto inning. Gregorio Petit dio sencillo, Yandy Díaz se ponchó, y Jesús Aguilar sonó incogible. Un rodado lento de Félix Pérez hizo avanzar a los corredores, tras lo cual Henry Rodríguez empujó una con infieldhit.
La segunda de los capitalinos llegó una entrada más tarde (en el quinto), mediante un jonrón solitario del careta Oscar Hernández.
La suerte le sonreía hasta entonces al Caracas, que pasó de la ilusión a la frustración con el estacazo de Salazar que volteó las cosas.