Esta semana, dos muertes han sido el resultado de enfrentamientos encabezados por el Comando Nacional Antiextorsión y Secuestro (Conas) de la GNB y la Base de Secuestro del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) en el municipio Morán. En ambos casos, a los fallecidos se les vincula con el núcleo dirigido por Ruperto Jesús Saavedra, El Bachaco. Sin embargo, hay quienes refutan estas versiones.
El caso más reciente es donde murió Roger Isaac González Rodríguez, apodado Rogito (o Rojito como ha sido reseñado anteriormente) por el diminutivo de su nombre de pila. A este hombre, de 28 años de edad, lo localizaron funcionarios del Cicpc en una posada de El Tocuyo, el jueves 10 de noviembre, y este, según indicaba el parte oficial, encaró a los efectivos con una pistola 9 milímetros incautada como evidencia.
En contraposición a esta historia han surgido también versiones en defensa de González Rodríguez, conforme a las cuales el abatido no estaba armado en el momento en el que llegó la comisión de seguridad.
Ese día, al parecer, Rogito había viajado desde el caserío La Estancia, municipio Morán, donde trabajaba como agricultor, hacia El Tocuyo para hacer el registro formal de una moto que había comprado y decidió pasar la noche en la posada donde cayó herido posteriormente.
Los reproches a la forma como murió vienen dados porque hay quienes lo definen como una persona trabajadora que en la actualidad no tenía vínculos con El Bachaco. Tampoco creen que haya representado un peligro para la comunidad.
La misma catalogación conservan de Amílcar Alexis Rodríguez Valera (38), abatido el martes 8 de noviembre en la calle principal de La Estancia y de quien se supo era primo de Rogito. El día de este acontecimiento, aparentemente, Rodríguez se disponía a salir de su casa para atender la siembra de café de su propiedad, cuando llegaron los funcionarios del Conas.
Por eso, tachan estos hechos como un ajusticiamiento contra personas inocentes y no descartan que se hayan desencadenado como una forma de presión contra El Bachaco, a quien las autoridades persiguen por su presunta participación en un homicidio en 2001, por robos y en casos más recientes por extorsión a productores morandinos y del municipio Jiménez, modalidad de delinquir que adoptó cuando se desligó de la banda Los Intocables y estableció otras alianzas.
Entre los organismos de seguridad se mantiene a los antes señalados como presumibles subordinados de El Bachaco encargados de cobrar las sumas de los chantajes. También, con los mismos vínculos identificaron a Yonny Antonio Álvarez, alias El Zurdo, quien falleció en un enfrentamiento en Humocaro Alto a principios de este mes.
