Un grupo de al menos 70 estudiantes de la Universidad Centroccidental Lisandro Alvarado (UCLA) habían tomado la sede del Rectorado de esta misma casa de estudios desde la noche del martes, en acción de protesta por la suspensión del servicio de comedor y transporte.
El miércoles realizaron una manifestación simbólica, cerrando el acceso de la vía, dejando un canal para el tránsito vehicular. Al mismo tiempo realizaban un sancocho en medio de la calle para alimentar a los universitarios, y por otro lado, participaban en una reunión del Consejo Universitario junto al rector Francesco Leone.
En esta asamblea se entregaron las peticiones y señalamientos de parte del estudiantado. Los resultados fueron positivos y tal es la razón por la que decidieron levantar la protesta y hacer a un lado la toma del rectorado.
“Las peticiones eran muy claras, queríamos el comedor reactivado y en plenas condiciones, se logró gracias a la unión de todos los decanatos y a nuestra lucha diaria. Se formalizó un acuerdo con los concesionarios del comedor y a partir del lunes contaremos con este servicio nuevamente, además de un menú adicional en comparación con el que contábamos anteriormente”, subrayó José Acosta, presidente del Centro de Estudiantes del decanato de Ingeniería Civil.
Indicaron que por ahora han ganado una lucha y que posteriormente mantendrán mesas de diálogos activas para lograr la renovación del beneficio de transporte. “Poco a poco, trabajamos en eso y lo haremos por partes, es importante que por lo menos los decanatos que tienen horarios nocturnos puedan contar con el mismo. Nuestras acciones están enmarcadas en la toma de medidas que ejerzan presión a las autoridades en casos de que seamos irrespetados”.
Para el lunes 7 de noviembre se prevé el funcionamiento normal del comedor, donde se les brindará a los estudiantes dos comidas al día (almuerzo y cena). Para Jesús Suárez, presidente del movimiento Miles, esto es una batalla a favor de los estudiantes.
“La intención es rescatar nuestras providencias y nuestros derechos estudiantes, queremos que nuestra bandeja sea la que teníamos hace algunos años, con jugo y con pan”, indicó.
Manifestaron su rechazo ante la postura que tomaron las autoridades en el consejo universitario al tildarlos de violentos por haber tomado el rectorado, asegurando que su protesta siempre ha sido pacífica.