Unas 100 familias se están viendo afectadas por un bote de aguas negras que tiene en la pestilencia, desde hace 11 días, a la comunidad Raúl Leoni 2 y 4 del municipio Palavecino.
“Me la paso todo el día como borracha y mareada por el hedor”, denunció la señora Eleodora González, quien habita en un ranchito en el que se origina la problemática.
Las aguas negras se empozaron en el hogar de González, por lo que un hijo de ella tuvo que “meter sus manos en las heces” para hacer una canal y guiar el agua cloacal hasta la calle; esta a su vez, por la magnitud del bote, llega hasta la avenida Intercomunal.
Una pequeña de un año se ha enfermado por la condición de insalubridad; le salió un absceso en una de las piernitas, presenta vómitos y tiene diarrea, según declararon los residentes, debido a la exposición a las aguas negras.
La lluvia de los últimos días en Cabudare ha empeorado el inconveniente, pues el fétido líquido se esparce en las humildes viviendas de la comunidad, incluso logra ingresar en algunas casas.
A pesar de realizar varios reportes a la Hidrológica del estado Lara, de la mano del consejo comunal de la zona, no fue sino hasta la mañana de ayer que una cuadrilla de la compañía se acercó al lugar para verificar el colapso de las cloacas; sin embargo, no dieron una solución concreta al instante porque tenían “otros compromisos”. Se habrían comprometido a asistir hoy para destapar la tubería.