Durante la semana recién concluida, circuló información sobre el traslado de reos de la Penitenciaría General de Venezuela (PGV), en San Juan de los Morros, hacia otras cárceles del país, entre estas Fénix, debido al conflicto iniciado el 27 septiembre, fecha desde la cual un grupo de visitantes se mantiene secuestrado dentro del recinto.
El viernes aumentó la tensión cuando se escucharon ráfagas de disparos, presumiblemente, de armas de alto calibre. Ese día en San Juan de los Morros, tal como lo reseñaron medios de esa región, se suspendieron las clases en las instituciones cercanas al centro penitenciario.
Los disparos, se presume, se originaron por un disputa por el control del penal entre el pran “Franklin Masacre” y el recluso que quiere desplazarlo alias “El Ratón”.
También emergió como motivo, según los familiares de los reclusos, un intento de tomar el control liderado por funcionarios del Comando Nacional Antiextorsión y Secuestros (Conas) de la GNB, quienes supuestamente entraron por el anexo femenino.
Entre el jueves y sábado salieron custodiados varios prisioneros con destinos a las cárceles de El Rodeo, Yare y Fénix. Los últimos habrían salido al mediodía de este sábado.
En Fénix y Uribana, durante fin de semana, los familiares que acudieron a la jornada de visita declararon no haber visto movimientos fuera de lo común en las adyacencias de la cárcel. No obstante, una de las mujeres presentes este domingo se comunicó con la madre de un reo barquisimetano que cumple pena en la PGV y esta le notificó que los traslados hacia Fénix no se habían concretado, porque su hijo todavía no se lo había comunicado.
El Ministerio de Servicios Penitenciarios anunció a través de un comunicado emitido el 17 de octubre el inició del Plan de Pacificación Penitenciario en la PGV y en el Internado Judicial Los Pinos, ambos ubicados en San Juan de los Morros, el cual incluye seguir con la “evacuación voluntaria de los visitantes”, “conminar a los internos a que entreguen de forma urgente y pacífica” a los reos enfermos y “exhortar a los internos que se encuentran en actitud hostil a deponer la violencia y desalojar pacíficamente los citados recintos”.
